Es muy probable que siempre te hayas puesto mal las horquillas

Están viviendo un auténtico boom: son las protagonistas de los peinados que llevan todas las influencers e incluso la estilista de las Kardashian ha diseñado una colección pensada para ir de fiesta. Las horquillas de pelo han formado parte de tu vida desde que eras pequeña, en la adolescencia y a día de hoy siguen salvándote el día cuando tienes que recoger algún mechón rebelde o hacerte un moño rápido para acudir a cualquier evento formal. Sin embargo, es muy probable que las hayas estado utilizando mal todo este tiempo porque te sorprenderías de la cantidad de tutoriales que existen en internet para aprender a colocarlas correctamente. Descubre la forma en la que deberías usar este accesorio capilar y comprueba cómo con un sencillo cambio mejorará la sujeción de tu peinado por completo.

Las horquillas sencillas clásicas están compuestas por un alambre metálico ondulado y otro liso entre los que se sujeta el pelo. Pues bien, mientras que suele resultar más cómodo deslizar la parte lisa por dentro del cabello, quedando pegada al cuero cabelludo, lo que en realidad debes hacer es todo lo contrario, colocar la parte irregular hacia abajo. Además de que es más estético que la superficie visible sea lisa, la parte con curvas de la horquilla es la que sujeta mejor al cabello, con lo cual permanecerá más tiempo sin moverse y el peinado aguantará más.

Peinado de invitada en 60 segundos

Ahora que ha quedado clara la forma correcta en que sacarle el máximo partido a las horquillas, existe un truco que puedes hacer con el que conseguirás el peinado de invitada más exprés. Comienza recogiéndote el pelo en una cola de caballo a la altura que prefieras. Una vez sujeta con la goma, levántala por encima de tu cabeza y coloca dos horquillas en posición vertical, sujetas a la base de la coleta y a la goma. Vuelve a bajar la coleta y... ¡tachán! Una cola de caballo voluminosa y sofisticada en cuestión de segundos