Nos encontramos en un momento de la moda en el que las líneas entre ropa masculina y femenina cada vez se encuentran más difusas, y en el armario de una mujer podemos encontrarnos con blazers muy estructuradas, cazadoras dad fit, mocasines clásicos e incluso corbatas. Sin embargo, pese a esta globalización de la moda, hay ciertas prendas en nuestro armario que siempre derrocharán feminidad; es el caso de las faldas satinadas, el encaje o el tweed. El tweed es uno de esos tejidos que nunca desaparecerán del repertorio de las mujeres; insignia de Coco Chanel y un símbolo de elegancia y sofisticación. Sin embargo, siempre le ha acompañado el estigma de que envejece o “hace mayor”. ¿Es eso 100% cierto?
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La textura densa y pesada y el imaginario estético que se le ha atribuido al tweed a lo largo de los años han hecho de este un tejido que rara vez vemos en los estilismos más juveniles, a pesar de que sea tremendamente elegante y goce de un aire clásico impecable. La experta asesora de imagen, Lucía Blasco, atribuye esta “mala” fama a la narrativa visual que se ha desarrollado en torno al tweed: “Se ha asociado un código muy concreto de feminidad pulida, correcta, seria y tradicional”.
Cuando pensamos en el tweed irremediablemente nos vienen a la mente total looks de falda y chaqueta, colores sobrios, muchas perlas y salones clásicos. Son estilismos que, a pesar de que efectivamente son muy sofisticados, inevitablemente los vinculamos con el estilo más clásico de las altas esferas, pero “es cuando los sacamos de ese marco, y lo mezclamos con color, energía y le damos un aire más fresco, cuando empieza a sumar personalidad”.
Errores que cometemos al vestir tweed
¿Cómo llevarlo de manera elegante sin que nos sume años? Recurrimos a los consejos de dos expertas asesoras de imagen, Lucía Blasco (@soyluciablasco) y María Moreta (@mariamoreta_). Lo primero que hemos de saber son cuáles son los errores más comunes que solemos cometer cuando queremos añadir alguna pieza de tweed a nuestros estilismos. Y así, poder evitarlos.
La asesora de imagen y experta en colorimetría, María Moreta, hace hincapié en que el principal error es llevarlo en un total look, porque, aunque esta sea su versión más icónica, también es la más clásica, y esto puede desembocar en una apariencia más madura y formal y menos fresca y juvenil.
“Son patrones y siluetas muy rectas y clásicas, que aportan mucho volumen a nuestra silueta. La clave para evitar este error es llevarlo con prendas más básicas, dando toques minimalistas, y romper con la formalidad de un total look, ya sea con una camiseta básica bajo la chaqueta de tweed, como con unos vaqueros con un fit más desenfadado”, explica María. Además, la experta nos asegura que también es un error crear estilismos donde haya contrastes de texturas, como tejidos brillantes y estampados de lunares, cuadros, rayas…
Por otro lado, Lucía Blasco subraya que otros errores al vestir el tweed son no romper con la paleta de colores demasiado formales (beige, negro y perla) y no arriesgarnos a romper su formalidad natural con texturas, prendas y estilos más contemporáneos. “En definitiva, lo que ‘envejece’ el tweed no es el tejido en sí, es el miedo a jugar con él, seguir los parámetros que nos devuelvan al imaginario más clásico”.
Cómo llevar el tweed, siguiendo los consejos de las expertas
Nuestras expertas coinciden en que, si queremos aventurarnos a introducir el tweed en nuestro armario, la pieza definitiva por la que debemos empezar es la chaqueta. Es la prenda más característica del tweed, nos evoca a la elegancia parisina de Chanel, pero la experta Lucía Blasco aboga por una versión más moderna, que evite sumarnos madurez a nuestra imagen: “con un color más llamativo, un fucsia, verde ácido, azul klein… que no sea una chaqueta ‘correcta’ sino una con mucha personalidad”. De esta manera, se conserva la estructura clásica pero se añade un toque diferente a través del color. La asesora de imagen aconseja combinarla con piezas que aporten un aspecto más casual y desenfadado, una camiseta gráfica, un pantalón tipo jogger… "que se cree contraste, no continuidad ni sobriedad”.
Por otro lado, María Moreta propone una alternativa más minimalista, una chaqueta de corte relajado, con un color que nos favorezca, y decantarnos por unos vaqueros wide leg, camiseta básica y unas zapatillas, para un look más urbano; o si queremos crear un look más sofisticado, optar por unos shorts de tweed o minifalda, combinada con la chaqueta, “se crea el total look, pero si se añaden unas botas altas, un jersey de punto fino o una blusa con lazada, se consigue dar un toque chic y actual”.
En cuanto a qué combinaciones funcionan mejor para no sumarnos años y hacerlo más actual, la experta Lucía Blasco nos recomienda crear estilismos donde haya “tensión estética”, combinar el tweed con prendas opuestas, que a primera vista, pudieran no encajar: “con cuero, ya sea en faldas, pantalones, shorts…que aporte fuerza y rebeldía a la feminidad clásica del tweed; o con tejidos técnicos, por ejemplo un pantalón cargo, para dar un toque moderno; transparencias, si queremos añadir sensualidad”.
Tweed en looks diarios:
Para crear looks que podamos llevar en nuestro día a día, la asesora de imagen Lucía Blasco propone tratar el tweed como si fuera una prenda más del armario, combinándola con prendas más relajadas y modernas que rompan con el clasicismo del tweed, como unos vaqueros baggy, faldas mini, botas moteras o unas bailarinas llamativas. María Moreta, por su parte, subraya la importancia de hacer del tweed la prenda protagonista, y que, a partir de ella, crear el resto del outfit, con prendas básicas sin estampados, en tonos neutros, pantalones con cortes rectos y limpios…
Tweed en looks más formales:
Para los looks más sofisticados, María aconseja sumar piezas con toques modernos, como blusas en tejidos satinados, escotes diferentes, que no nos desvíen la atención de la textura del tweed; mientras que Lucía Blasco opta por tops originales con detalles metalizados, apostar por joyería arquitectónica, o prendas con cortes asimétricos.
¿Y accesorios? Minimalistas, con un toque rompedor
Los accesorios tienen el poder de transformar un estilismo. A la hora de vestir una prenda de tweed, es muy importante escoger los accesorios adecuados. No pueden verse descuidados, ni demasiado clásicos, para evitar así el efecto ‘sumar años’ al look. Las expertas coinciden en que el accesorio que pongamos ha de ser moderno y con carácter, y nos recomiendan las siguientes opciones:
- Zapatos: unas botas altas o moteras, si queremos añadir un punto rebelde; unos mocasines clásicos o bailarinas Mary Jane, si optamos por un estilo más preppy.
- Joyas: las expertas abogan por los dos extremos, una perla muy minimalista o unos aros sencillos, si no queremos que tengan gran protagonismo; o unas cadenas gruesas y pendientes asimétricos, si queremos que llamen un poco más la atención. Pero, importante, si son joyas metalizadas, que siempre vayan acorde con los botones de la chaqueta tweed.
- Bolsos: María Moreta insiste en que han de ser, sobre todo, de buena calidad, y sencillos. Lucía, por otro lado, recomienda que tengan un color vivo, o alguna textura, como un metalizado, terciopelo, o charol.