No es habitual (tampoco tenemos que engañarnos) que los miembros de la realeza viajen en transporte público. Por su condición, son ajenos al concepto de hora punta, desconocen cuántas líneas de autobús existen o qué ruta es más rápida para ir de una punta a otra de la ciudad en metro. Solo Chanel podía conseguir, por tanto, que Carlota Casiraghi bajara las escaleras del subterráneo de Nueva York, poco glamuroso en comparación con el Palacio Grimaldi, para presenciar -sentada en uno de los bancos del andén- su desfile Metiers d'Art 2026.
© WireImageCarlota Casiraghi sorprende en el metro de Nueva York (vestida de Chanel)
La estrecha conexión de Carlota con Chanel, como bien sabrás, tiene raíces familiares. Su madre, Carolina de Mónaco, mantenía una relación tan cercana con Karl Lagerfeld, exdirector creativo de la casa, que incluso él se encargaba cada año de organizar el Baile de la Rosa del Principado, uno de los eventos más emblemáticos en la agenda de los Girmaldi. Este vínculo se fortaleció en 2020, cuando fue nombrada embajadora oficial de Chanel; desde entonces, la aristócrata, de 39 años, no ha dejado de lucir creaciones de pasarela con la icónica doble 'C', como tampoco se pierde ninguno de sus desfiles, ni siquiera este, que tuvo lugar en un escenario desconocido para ella.
Estamos acostumbradas a verla enfundada en los clásicos trajes de tweed de Chanel que, con el tiempo, se han convertido en su comodín de estilo. Lo que no esperábamos era que cambiase los típicos cuadros o las rayas por un estampado mucho más atrevido y en un color que pocas veces ha llevado. Para el debut de Matthieu Blazy con su colección Metiers d'Art, estrenó un abrigo inédito y salvaje, que solo ella sabría lucir con tanta elegancia.
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© ChanelExaminando colecciones anteriores de Chanel, no encontramos ni rastro del abrigo naranja que este martes se puso Carlota para el desfile celebrado en la estación abandonada de Bowery. ¿Acaso perteneció a su madre? Con frecuencia, tanto ella como su hermana menor, Alejandra de Hannover, hacen guiños a la princesa Carolina reciclando vestidos y trajes antiguos de Chanel, pero tampoco fue el caso en esta oportunidad.
No obstante, en la misma colección Metiers d'Art 2026 -sí, aquella que Carlota presenció desde el andén hace solo unas horas- observamos una prenda que da pistas sobre la procedencia de este misterioso look: un vestido con textura de escamas brillantes (las cuales son, en realidad, bordados a mano) con estampado de rayas de tigre.
© WireImageUn abrigo salvaje e inédito
Por si necesitáramos más argumentos para convencernos, este diseño de pasarela, al igual que el abrigo de la monegasca, está realizado en hilatura de lana metalizada, lo que le da ese punto de brillo más festivo. No nos cabe la menor duda de que es obra de Mattieu Blazy. Entonces, ¿fue hecho a medida?
Intuimos que sí, aunque no hay confirmación oficial por parte de Chanel. El aspecto vintage de la prenda, con sus hombros estructurados, el cuello subido, los botones enjoyados, bolsillos frontales y su cinturón a juego, hacen dudar de buenas a primeras. Carlota completó el look con unas medias tupidas que se funden al llegar a sus pies con los salones negros de puntera blanca a contraste, un calzado insignia de la firma que ya tiene por decenas en su zapatero.
© ChanelAsí fue el desfile Metiers d'Art 2026 de Chanel
La maison trasladó la pasarela a una estación de metro abandonada en el Lower East Side de Manhattan, transformando el espacio en un escenario cinematográfico lleno de luces cálidas, bancos vintage y trenes de los que emergían modelos, capturando la energía ecléctica y democrática de la ciudad. La colección homenajeó a los artesanos de Chanel, con plumas, bordados y tweed reinterpretados mediante técnicas innovadoras que caracterizan la propuesta de Blazy.
El desfile exploró personajes icónicos de Nueva York y referencias históricas al legado Chanel, combinando peinados de los años 20, sastrería de los 80, estampados estridentes y réplicas de los archivos de la firma. Es esa dualidad la que encontramos en el look que eligió Carlota para hacer acto de presencia: la tradición se da la mano con la innovación.
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© Getty ImagesEl truco de Carlota para vestir bien siempre: bloques de color
Hay un truco que repite en sus apariciones y que puedes copiar para acertar siempre a la hora de vestirte. Y es tan fácil como apostar por looks bicolor. Con ropa y accesorios en solo dos tonos, puedes conseguir los mejores resultados y sin hacer apenas esfuerzo. ¡Carlota es la prueba! Pero, ¿por qué la nieta de Grace Kelly recurre con asiduidad a esta clave estilística? La razón está en su unión con Chanel.
Además de aficionarse al tweed, las perlas, la doble 'C' o los metalizados, como ya le había ocurrido a su madre en los años 80, descubrió lo sofisticado que es organizar cualquier look por bloques de color: dos o tres como mucho para jamás verse recargada, pero tampoco aburrida. Está claro que, si vas a decantarse por un abrigo naranja con estampado de rayas de tigre, lo mejor es restringir el uso de tonalidades vivas en el resto del conjunto.
