"Durante un tiempo me consideraron el hombre mejor vestido del mundo y era porque me ponía la ropa de Anita. Ella tenía un ojo increíble", admite Keith Richards en el documental Catching Fire: The Story of Anita Pallenberg (2023) sobre la que fue musa de The Rolling Stones y su pareja durante más de una década.
Nacida en Italia de padres alemanes muy estrictos, Anita Pallenberg (1942-2017) siempre fue una "niña salvaje y rebelde", como ella misma se definió en sus memorias. En 1963 se escapó de una Alemania que todavía seguía lidiando con las consecuencias de la guerra, donde vivía con su familia, para marcharse a Nueva York. Allí comenzó a trabajar como modelo: "Odiaba la peluquería, las pestañas postizas y todas esas chorradas", admitió. Pero aquella profesión le abrió puertas y le hizo conocer mundo gracias a varios viajes. Fue mientras estaba en Múnich, en 1965, cuando su vida dio un nuevo giro.
© Getty ImagesLos Rolling tocaban en la ciudad, y como era habitual en aquella época cada vez que daban un concierto, suscitaban una locura colectiva entre sus seguidores, que no dudaban en asaltarles subiéndose al escenario. "Mis amigos me retaron a secuestrar a uno de ellos", confesó la propia Anita, que aquella noche se encontraba entre el público.
Pero no le hizo falta llegar a tanto: bastó con colarse en los camerinos para captar la atención de la banda, en especial, la del guitarrista Brian Jones. Con él se fue a vivir a la casa que este tenía en Londres y mantuvieron una relación de dos años que viró en un amor tormentoso marcado por los malos tratos y los excesos que consumieron al músico.
© Getty ImagesFue en 1967, durante un viaje que Brian Jones, Anita Pallenberg y Keith Richards hicieron en coche de Inglaterra a Marruecos, cuando surgió una poderosa conexión entre estos dos últimos. Tras su paso por Francia, Jones tuvo que ser hospitalizado y tanto Anita como Keith decidieron continuar con el trayecto. "Estaba perdidamente enamorado de ella, de su independencia, de su absoluta determinación de ser libre", confiesa él en el documental.
© Getty ImagesTras aquel viaje, Anita terminó su relación con Brian Jones y comenzó a salir con Keith: "Era un tipo de amor diferente al que había experimentado", contó ella. "Keith era tímido, yo le espabilé con mi energía italiana. Por aquel entonces parecía un león, natural y muy a la moda". Fue Anita Pallenberg quien influyó en el armario del guitarrista, y durante los primeros años de su relación, se convirtieron en auténticos iconos.
© Getty Images"Tenía mucho estilo, yo todavía intento recrearlo", llegó a confesar Kate Moss, quien trabó amistad con la modelo y actriz de Barbarella, a quien siempre tuvo como referente. "Tenía esa estética bohemia-rock-elegante a la que la gente sigue aspirando hoy en día". Recordamos algunos de los conjuntos icónicos que Anita Pallenberg y Keith Richards lucieron.
Pura esencia setentera
Los complementos eran clave en los conjuntos de Anita Pallenberg, que a menudo incorporaba joyas vistosas y anillos de pedrería, al igual que Keith. Así aparecieron ambos en 1970 en la premier de la película Performance, protagonizada por Mick Jagger.
© Getty ImagesMaximalismo
Posaban en 1967, sentados en la terraza del Hotel Excelsior de Venecia, con looks que sin duda contrastaban con la exclusiva clientela del alojamiento. Y es que la discreción nunca formó parte de las elecciones de moda de ninguno de los dos.
© Getty ImagesSu idea de look 'formal'
Uno de los motivos por los que pareja se mudó tanto durante su relación, fue para mantenerse alejados de la justicia con la que habían tenido tantos problemas. En 1973 se presentaron en los tribunales de Londres intentando mostrar su faceta más formal: Keith con un traje de chaqueta y Anita con un conjunto negro que acompañó con un vistoso sombrero de ala ancha, accesorio habitual en este tipo de encuentros.
© Getty ImagesSu lado más hippie
No faltaban tampoco los conjuntos a todo color en el vestidor de la pareja, que lucieron especialmente durante su estancia en Villa Nellcôte, la mansión de la Costa Azul donde vivieron una temporada junto a su hijo Marlon y que se convirtió en lugar de grabación para el grupo, así como en escenario de fiestas multitudinarias.
© Getty ImagesEn la boda de Mick Jagger
Ninguno de los integrantes de The Rolling Stones se dejaba guiar por los convencionalismos, lo que quedó reflejado en la boda de Mick y Bianca Jagger en 1971, en Saint Tropez. Sus invitados reflejaban aquel estilo glam rock propio de los setenta, como demostró Anita Pallenberg con un vestido tipo túnica en blanco, y Keith Richards, luciendo unos vistosos pantalones con brillante pedrería.
