Mientras invertía la mañana completa del domingo pasado en hacer el cambio de armario, me di cuenta de que la mitad de mi ropa de verano estaba formada por vestidos de los que me daba pena despedirme. Son prendas que, con un poco de imaginación y la ayuda inestimable de las chicas que me inspiran en redes sociales, creo que puedo seguir utilizando durante los meses más fríos del año.
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¿El truco? Combinarlos con un jersey de punto oversize por encima y acompañarlos con unas botas altas, así como con los accesorios adecuados. Una técnica que he visto aplicar a referentes de la estética boho chic, como Sara Carbonero, y que permite convertir los vestidos en una prenda 2 en 1, haciendo que parezcan faldas midi perfectas para el otoño.
Así lo hacía la periodista con este vestido fluido y largo en color blanco, de tirantes, al que agregó por encima un jersey crudo de punto calado. Una combinación exitosa que visualizo a la perfección en mi armario, junto con unos botines cowboy y un abrigo marrón de doble faz.
Este conjunto de Sara Carbonero es un trampantojo estilístico, pues aunque parece que se trata de un vestido satinado con aberturas que ha lucido con un jersey ajustado por encima, en realidad es un diseño completo de Max Mara, de la colección Primavera/Verano 2025. Pero sirve de inspiración para aplicar este truco igualmente con nuestros diseños de invitada de verano.
Tengo un vestido animal print en mi armario, satinado y de tirantes, que ahora ya sé cómo darle vida también este otoño. Pienso copiarle el truco de añadirle por encima un jersey negro, junto a un cinturón vintage de flecos y unas botas también oscuras. ¡Ideal para un look de oficina diferente!
Confesaré que únicamente llevo esta prenda cuando voy al gimnasio o bien la uso para estar en casa, pero Sara Carbonero me ha demostrado que las sudaderas también pueden encajar junto a un vestido (o falda) más formal, logrando un buen equilibrio. Una combinación que nunca se me habría ocurrido, y menos con una prenda estampada como la suya, pero creo que podría llevarla a un brunch de domingo sin problema.