Como muchas niñas, Lucía Avilés soñaba con un futuro en el mundo de la moda, sin imaginar que algún día esos sueños se harían realidad. Crecer con esa pasión ha marcado su vida, y gracias a su esfuerzo y dedicación, ese momento finalmente ha llegado. Hoy, con 22 años, reside en Milán y vive entre aviones, sesiones de fotos, fittings y pasarelas de grandes casas como Armani y Carolina Herrera. Sin embargo, siempre que encuentra un hueco, regresa a su tierra, Dos Hermanas, su hogar, donde se encuentran sus recuerdos, su familia y su gente. Nos recibe en esta localidad sevillana, y entre calles conocidas y rincones llenos de historia, posa con las tendencias de otoño-invierno, confirmando que volver a casa siempre es un acierto. Fuera de las pasarelas, Lucía es una chica más: le gusta el pilates y disfruta de los pequeños momentos de su día a día, construyendo, al igual que otras españolas como Blanca Padilla, un camino propio en la moda internacional.
¿Siempre tuviste claro que lo tuyo era ser modelo?
Desde pequeña, supe que me quería dedicar al mundo de la moda, porque es lo que más me llena. Recuerdo que cada verano, en un club al que íbamos, organizaban un desfile de moda para los niños y, para mí, era el momento más especial del año. Por eso, a día de hoy, me siento muy orgullosa de haber llegado tan alto.
De Dos Hermanas a Asia, Nueva York y... ¡el mundo entero! ¿Cuál crees que ha sido la clave de tu éxito en esta profesión?
En concreto, han sido dos. La primera es la perseverancia y el no rendirme a la hora de perseguir mis sueños; he escuchado muchos “noes” antes de triunfar. El otro "punto" fue, sin duda, el cambio de look. Eso se lo debo a mi agencia. Antes llevaba el pelo largo y teñido de rubio y ellos supieron ver mi potencial y me animaron a dar el paso de volver a mi color natural y cortármelo.
"Soy muy transparente. Me encanta mostrar mi personalidad en el trabajo y aportar buenas 'vibras'"
¿Cómo es un día en tu vida?
No hay uno igual a otro. Hoy estoy aquí, con unas fotos para ¡HOLA!, y mañana me pueden decir que tengo un trabajo en Londres, o que tengo que volver a Milán. No puedo planear nada, pero a mí me gusta.
¿Qué haces para mantenerte en forma?
El deporte está presente en mi día a día. No solo para mantenerme bien físicamente, sino también para desconectar un poco y mantener activa mi mente. Me encanta el Pilates y hacer rutinas en el gimnasio.
¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?
Conocer a gente nueva, de distintos países y culturas, me aporta muchísimo a nivel personal y me ayuda a crecer como persona. También, obviamente, la posibilidad de trabajar con profesionales y continuar aprendiendo. Cada trabajo es una oportunidad para seguir creciendo.
¿Cómo es Lucía lejos de la pasarela y las cámaras?
No hay una línea que separe mi yo como modelo y mi yo como mujer. Soy muy transparente, me encanta mostrar mi personalidad en mi trabajo y aportar buenas "vibras", ser positiva y fiel a mi esencia.
Estamos en tu tierra. ¿Qué sientes al volver a casa?
Es algo maravilloso. El día antes de venir siempre estoy supernerviosa, pensando en no perder el avión y en que todo esté bien para poder volver. Al llegar, me encanta ver a mi madre esperándome con la comida recién hecha. Y el olor de mi casa… es una sensación que no cambiaría por nada del mundo. ¡Volver siempre es una alegría!
¿Qué es lo que más te gusta de la cultura andaluza?
De Andalucía me quedo con muchas cosas. Con su gente, su forma de vivir la vida y su sentido del humor. También con el clima y sus paisajes y, por supuesto, con su gastronomía. Me quedo con todo, ¡me quedo con Andalucía!
"De Andalucía me quedo con la forma de vivir la vida y el sentido del humor de su gente"









