Más de 150 invitados se han dado cita en la IV edición de los Premios Talento Fashion, que entrega la revista FASHION, del grupo ¡HOLA!; y que, este año, se han contado con la actriz Goya Toledo como presentadora. En una atmosfera glamurosa, el Consulado Italiano de Madrid ha vibrado con emocionantes momentos y mucha moda, no solo por la emoción de los galardonados, sino por los looks que se vieron sobre la alfombra roja, como los de Lady Eliza y Lady Amelia Spencer, sobrinas de Diana de Gales: las periodistas Isabel Jiménez y Sara Carbonero, o Gala González, que apostaba por un diseño de Armani, con el que homenajeaba al tristemente desaparecido diseñador. Y, entre ellas, también brilló Alexandra Pereira, que se ha atrevido con un diseño a todo color.
© GTRESUna influencer con mucho estilo que marca la diferencia
Bajo el pseudónimo de Lovely Pepa, Alexandra Pereira revolucionó el mundo digital mucho antes de vivir una saturación de contenidos digitales. Lo empezó en 2009, y se convirtió en todo un referente de estilo. Natural de Vigo, la gallega, casada con el empresario Ghassan Fallaha (tienen dos hijos, Sasha (3); y Josephine (que nació el 20 de abril de 2025), ha impactado en estos galardones con un look brillante, transgresor, fuera de la común y arquitectónico. Eso sí, aunque en este tipo de citas el negro se convierte en un color comodín, la creadora de contenido ha preferido innovar y arriesgar con tonalidades metalizadas y muy saturadas.
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© GTRESUna exclusiva creación de Jorge Redondo
La influencer, que peinó su melena engominada en acabado mojado y retirada de su rostro, lució un vestido hecho en exclusiva para ella por su gran amigo el diseñador Jorge Redondo, modisto de Redondo Brand. Precisamente, ella le entregó al creador español el Premio Talento Fashion como Diseñador del Año. En concreto, de este cacereño, uno de los favoritos de Isabel Preysler y que vistió a la reina Letizia en la misa del pontificado del Papa León XIV el pasado 18 de mayo de 2025 en la Plaza de San Pedro de El Vaticano, defendió con elegancia y glamour un corpiño drapeado de satén de seda color cobre y escote palabra de honor, que se contrastaba en volumen con una falda tipo globo cubierta enteramente por lentejuelas plateadas sobre la que se bordaron paillettes tipo espejo.
