Hoy, Victoria Federica, en uno de esos días en los que no se necesita más que un top de tirantes y un pantalón blanco para vencer al calor (y al algoritmo), nos recuerda por qué los básicos son el verdadero lujo del verano. La imagen llega desde Illescas, Toledo, donde la sobrina del Rey ha hecho una escapada al restaurante El Bohío, casa madre del chef Pepe Rodríguez, jurado de MasterChef y guardián de los sabores manchegos de autor. No ha ido sola: la ha acompañado su inseparable amiga Rochi Laffón y Samantha Vallejo-Nájera.
Pero más allá del plan , gastro, distendido y típicamente estival, lo que ha captado la atención de los ojos más avezados es el look que ha elegido Victoria para la ocasión: un top blanco de tirantes, pantalones del mismo color, cinturón negro clásico y sandalias de tiras con un toque dorado.
El blanco en verano: la no-tendencia que lo es todo
Hay una verdad que Victoria parece haber entendido con naturalidad: el blanco, en verano, no es solo una elección estética, es casi una declaración de principios. Funciona en la ciudad, en el campo y en cualquier mesa bajo una sombrilla. Desde la Roma de los 60 hasta las escapadas de Jackie Kennedy en Capri, el blanco ha sido símbolo de frescura, sencillez y estilo sin esfuerzo. Aquí algunas prendas de inspiración:
El básico como privilegio
Los básicos, bien llevados, son el privilegio de quienes no necesitan llamar la atención para tenerla. Victoria Federica ha ido puliendo ese estilo relajado, casi improvisado, que en realidad tiene mucho de estudiado. Le basta una silueta simple, una pieza heredada (ese cinturón podría haber sido de cualquier armario masculino de los 90) y un mínimo gesto dorado en los pies para recordarnos que menos sigue siendo más.
Los accesorios que nos inspira el look de Victoria Federica:
Este look algo más que una elección veraniega: es una lección de estilo cotidiano. Un recordatorio de que, entre tanto maximalismo de redes, hay algo valiente, y muy elegante, en optar por lo esencial.