Amaia Salamanca atraviesa una de sus etapas profesionales más potentes, inmersa en el rodaje de una nueva serie ambientada en el mundo ecuestre, que tiene previsto convertirse en uno de los estrenos más esperados del próximo año. Se trata de Pura sangre, una ficción aristocrática con misterio, romance y caballos, tres ingredientes que en este momento forman la receta perfecta para el éxito, como comprobamos con la fiebre por las novelas de cowboy modernas o con tramas tan aplaudidas como Yellowstone.
Una historia que llevará Telecinco a la pequeña pantalla y en la que comparte protagonismo con Ángela Molina, Blanca Romero o Aitor Luna. Y aunque todavía quedan unos cuantos meses para poder verla, la madrileña se encuentra ya en plena promoción del proyecto. Este miércoles han salido a la luz algunas imágenes de producción, en las que hemos podido ver a Amaia Salamanca con el uniforme favorito de las chicas que, como Bella Hadid, también se han dejado cautivar por la estética western.
Demostrando que un vaquero bien escogido puede cambiarlo todo, ha posado con un modelo acampanado de aires setenteros, de tiro alto y bolsillos delanteros, que tiene esa capacidad de resaltar la silueta, alargando visualmente las piernas. Unos jeans que son la nueva obsesión de aquellas que reniegan de siluetas como los pitillos o skinny jeans, que parecen vivir un declive progresivo, con la excepción de algunas nostálgicas que todavía los guardan con cariño.
El que ha lucido la actriz, junto con un fino jersey de punto con mangas de murciélago y botas oscuras, es un tejano de la firma & Other Stories, con trabillas y detalles despunteados, que actualmente se encuentra disponible por 89 euros. Confeccionado con un 99% de algodón, no hace falta que esperamos al otoño para poder lucirlo, pues se trata de un tejido cómodo también para las noches de verano.
La estética cowgirl vive un auge evidente, no solo en televisión. El éxito global de Yellowstone y el boom editorial de novelas ambientadas en ranchos, con historias de herencias familiares, conflictos rurales y pasiones contenidas, han devuelto a la moda ese imaginario de caballos y grandes llanuras. Incluso la modelo Bella Hadid ha abrazado esta corriente estilística desde que sale con el jinete profesional Adan Banuelos, incorporando vaqueros acampanados, sombreros, chalecos, cinturones de hebilla o tops encorsetados a su armario cotidiano.