Steffy Argelich es la prueba de que nunca es tarde para reinventarse: dejó la pasarela para volcarse en el cine, su gran pasión. Ha producido su primera película, Vera (2023), y vive un momento vital pleno. Hablamos con ella sobre valentía, creatividad y el poder de tomar las riendas para seguir el camino del corazón.
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Llevas prácticamente toda la vida siendo modelo. ¿Qué te llevó a dar un giro de 180° a tu carrera y convertirte en directora de cine?
La moda me enseñó muchísimo, pero sentí la necesidad de contar mis propias historias, no solo ser parte de las de otros. Quería expresarme de una forma más profunda, más personal. Conocer a mi marido, el cineasta Grear Patterson, me inspiró muchísimo.
¿Qué es lo que más te gusta del cine?
Su poder para contar historias que trascienden el tiempo, los idiomas y las culturas. El cine permite explorar emociones humanas profundas y cuestionar la realidad. Para mí, dirigir es una forma de conectar con los demás, de crear mundos que, aunque ficticios, pueden tocar verdades muy reales.
¿Cómo ha sido dar el salto de estar delante de la cámara a estar detrás?
La verdad es que siempre me he sentido cómoda con ambas cosas. Ha sido un cambio retador, pero muy enriquecedor. Estar detrás de la cámara me permite tener una voz creativa más completa y controlar la narrativa.
"Quería expresarme de una manera más profunda, más personal"
Cuéntanos sobre tu primer proyecto audiovisual, Vera (2023).
Es mi debut como cineasta; recibió una acogida muy positiva. Narra la historia de Ale (Alejandro Castro), un joven abogado que llega a una isla española cargado de culpa y con la idea del suicidio en mente. Allí se encuentra con Vera (Nicole Wallace), una adolescente en pleno despertar existencial, que le muestra una visión idealizada de una vida que él ya no desea.
¿Crees que la moda y el cine van de la mano?
Sin duda. Son dos artes que se complementan perfectamente. Ambos se basan en la creación de imágenes que transmiten ideas, emociones y estilos de vida. La moda aporta al cine una dimensión estética fundamental, mientras que el cine da vida y contexto a la moda.
En este reportaje posas con diseños de Louis Vuitton, ¿qué relación tienes con la firma?
Uno de mis primeros grandes trabajos fue con Louis Vuitton, en el primer desfile de Nicolas Ghesquière. Siempre me he sentido muy cómoda y conectada con sus diseños y esa relación profesional ha crecido con el tiempo, construyendo una historia de colaboración y confianza mutua. Es un honor formar parte de su universo creativo.
"El cine permite explorar emociones humanas profundas y cuestionar la realidad"
¿Qué te inspira? ¿Quiénes son tus referentes?
Me inspiran las cosas cotidianas y el placer en los momentos simples. Algunos de mis referentes principales son François Truffaut, Jean-Luc Godard, Agnès Varda, Federico Fellini...
¿Tienes algún sueño por cumplir?
Quiero seguir creando, aprendiendo y dejando una huella que inspire a otros.
Producción: The Crew. Dirección de arte: Eugenia Silva. Fotografía: Martin Gatty. Estilismo: Fonchi Nahum. Maquillaje: José Belmonte. Peluquería: Manu Fernández. Asistente de Fotografía: Tomás Ávila del Moral. Asistente de estilismo: Blanca Pérez Cabrero.