Seguramente te han dicho mil veces que no se debe vestir de negro en verano, y las excusas parecen infinitas: que sudas más, que va a irritarte la piel o que incluso puede provocarte un golpe de calor. Cuando recorrí Marruecos de norte a sur, en agosto de 2021, me llamó la atención que las chicas locales vestían de negro, azul marino, marrón y todos los colores de este espectro. Allí me surgió una duda que apenas hoy, casi cuatro años después, voy a responder. ¿Por qué esta creencia que tenemos tan afianzada en España no se repite como refrán popular en las zonas desérticas del Magreb? ¿Qué saben ellas que nosotras no?
¿Vestir de negro en verano da calor?
Si hasta en Santander, que en julio se puede disfrutar de unos agradables 25 grados de temperatura, nos dicen que vestir de negro da calor, ¿por qué allí donde el sol sí calienta impunemente, como Marruecos, esta regla no aplica? He consultado con la ciencia y creo que es momento de aceptar que nuestras abuelas (y los mitos que hemos aprendido de ellas) no siempre tienen LA razón.
Desmontamos el mito con una experta
El negro absorbe toda la luz visible del espectro solar; es decir, transforma más radiación en calor que los colores claros, como el blanco. Pero este no es el único factor a tomar en cuenta. Yulissa García, maestra en ciencia de materiales, nos lo explica al detalle:
"Cuando la luz solar llega a una prenda, esta puede reflejarse, transmitirse o absorberse. El color negro absorbe casi toda esa luz y la energía luminosa que capta se transforma en energía térmica; en otras palabras, se transforma en calor".
Entonces, ¿mi abuela tenía razón? En parte, sí, pero el asunto es mucho más profundo. Es lo que tienen las medias verdades, que omiten una parte crucial de la información. García insiste: "Si es una tela cerrada y poco transpirable, retiene ese calor. Por lo contrario, si es un tejido ligero y fresco, ayuda a que el aire se impulse y el cuerpo se enfríe, incluso si la prenda es oscura".
"Vestir de blanco puede dar más calor que vestir de negro"
La solución no consiste en evitar los tejidos oscuros a partir del mes de junio. De hecho, una camiseta blanca de algodón puede darte más calor que una camiseta negra de lino. Aunque ambos son materiales recomendables para hacer frente a las temperaturas estivales, el lino transpira mucho mejor, mientras que el algodón atrapa la humedad y se seca más lentamente. Y ni hablar de ciertos tejidos sintéticos que, sin importar el color, son incapaces de ventilar.
Esto es lo que más influye, según la ciencia
Desde Escorpion, firma líder en el sector del punto en España, nos aseguraban: "Algunos sintéticos modernos, como la poliamida, pueden ser muy transpirables y absorbentes, además de secar rápido, lo que ayuda en climas cálidos. Sin embargo, otros tejidos sintéticos, como el poliéster simple o el acrílico, tienden a retener calor y humedad, lo que puede ser muy incómodo".
Así que sí, el negro absorbe más luz, pero si eliges prendas fresquitas, hechas de lino o bambú, podrías estar más cómoda que cualquier chica vestida de blanco.