Cádiz, el mirador del Atlántico

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Playa de la Caleta: Es una de las playas más bellas de España. Mira hacia poniente, allí donde el Sol se pierde cada tarde entre las aguas doradas del Atlántico. El arco de arena canela que dibuja la playa, flanqueado por los castillos de Santa Catalina y San Sebastián, está presidido por el antiguo balneario de la Palma, con una exquisita arquitectura colonial.

Campo del Sur: La avenida que perfila la orilla atlántica de Cádiz es una de las estampas más bellas y conocidas de la capital. Desde uno de sus ángulos, próximo al baluarte de Capuchinos, se divisan las viviendas de colores y la parte trasera de la catedral, una imagen que hace recordar al caminante la ciudad cubana de La Habana.

Catedral: Erigida en el siglo XVIII, es de estilo barroco. Su fachada luce un aire colonial, muy similar al de otros templos católicos de la América hispana. En su interior, además de la cripta, donde descansa el compositor gaditano Manuel de Falla, se guardan imágenes religiosas de Martínez Montañés y La Roldana.


Plaza de las Flores: Es la más populosa y viva de las plazas gaditanas. En ella reside el alma de la ciudad y toman asiento puestos de flores próximos al mercado central, donde desde bien temprano bulle la vida. Los bares y restaurantes que la rodean forman parte del catálogo más clásico de la capital.