Un bello conjunto serrano tiene Galve de Sorbe, con capiteles y cenefas adornando los muros de sus casas, un rollo gótico donde se colgaba a los ajusticiados y la iglesia de origen románico. En lo más alto, oteando la cercana sierra de Ayllón, se levanta el castillo fundado por el infante don Juan Manuel en el siglo XV. Desde aquí, a un paso queda el hayedo de la Tejera Negra, excursión imprescindible para volver en otoño a este entorno cuando sus hojas se vuelven ocres.
Un pueblo negro, una cascada descomunal, un hayedo y mucha soledad
Desde Atienza en dirección a Sigüenza, Imón y La Olmeda de Jadraque tienen unas interesantes salinas que se remontan a la Edad Media y de las que se conservan aún algunas instalaciones ejemplares únicas. El castillo de Riba de Santiuste, del siglo XII, fue una de las fortalezas que guardaban los pasos de los ríos Dulce y Salado, como también lo fue la que se levanta en la villa fortificada de Palazuelos, construida en el siglo XV por el marqués de Santillana. Cuatro kilómetros más adelante, la iglesia del Salvador de Carabias posee un espléndido atrio porticado con 14 arcos de medio punto sobre bellos capiteles.