9 consejos de decoración que deberías ignorar para una casa sin complejos

Expertos en decoración hay muchos. Y no está de más escuchar lo que tengan que decir. Pero su opinión, gustos y conocimientos no son infalibles y puede que no encajen con tus gustos en decoración, y mucho menos con lo que quieres para tu casa. Por eso, a veces, es mejor hacer oídos sordos. 

Hemos recopilado algunos de los consejos más típicos que da la gente sobre decoración y que, puede, no encajen con tu manera de ver tu casa. ¿Empezamos?

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1. 'Pon todos los textiles iguales'

No se trata de no tener en cuenta los códigos de color o ignorar las distintas gamas cromáticas. A la hora de elegir las telas que decorarán una estancia, elige un par de colores, o tres, y combínalos como quieras. Este consejo se trata de no repetir los mismos estampados en los cojines y las cortinas, por ejemplo, como se hacía hace décadas. Eso hará que la decoración quede muy encorsetada y pasada de moda. Lo ideal es elegir varias tonalidades del mismo color y combinarlas, como ha hecho aquí la interiorista Raquel González, donde podemos ver distintas intensidades y matices de azules, negros y grises, con distintos estampados y matices. ¡Ideal!

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2. 'El salón no se usa'

¿Te acuerdas cuando eras pequeño y el salón de la casa de tus padres o abuelos era más una sala de exposiciones que un espacio donde compartir? Siempre con la puerta cerrada e impoluto, apto solo para las visitas.

Pues los tiempos han cambiado y nuestro salón también. Y es que esta estancia de nuestras casas ha evolucionado para convertirse en el espacio en el que compartimos en familia, pasamos tiempo relajándonos y desconectamos del día a día.

Por eso, ahora el sofá prima por su comodidad y número de plazas que ofrece y los muebles, por su durabilidad, facilidad de limpieza y aspecto liviano. Y nada de recargar el espacio con adornos y cosas. Aquí nuestra recomendación es que te dejes llevar por tus gustos y aficiones, sin saturar el espacio para que limpiar no se convierta en un indordio. 

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3. 'Todos los muebles del mismo acabado'

Por mucho estén expuestos en la tienda todos juntos y te parezca bonito, lo más probable es que cuando lleguen a tu casa te dé la sensación que la tienda se ha mudado a tu hogar.

Por eso, a la hora de decorar cualquier estancia, pasa de sets que combinen el mueble del salón, la mesa del comedor y la de centro o el armario, con el cabecero y las mesitas de noche. Es mejor tener en cuenta qué acabados y colores quieres llevar a tu hogar e ir eligiendo las piezas una a una. Deja que te hablen, que te ayuden a definir tu estilo. Y nunca al revés. 

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4. 'La vajilla buena es solo para las ocasiones especiales'

Pues no. La vajilla buena es para cuando quieras usarla. A diario, con visitas o solo para las ocasiones especiales. ¡Tú eliges!

Y lo mismo vale para otro tipo de elementos, como los manteles, la cubertería o la cristalería. ¿Para qué lo tienes si no es para lucirlo y disfrutarlo? 

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5. 'No inviertas mucho en decoración'

Este es el consejo al que NUNCA deberías hacer caso. Y es que, aunque haya muchas tiendas de muebles low cost, invertir poco dinero en ciertas piezas solo hará que se estropeen antes y que tengas que renovarlas. Cierto que para esa época joven en la que hay poco presupuesto, son perfectos, pero si puedes invertir en un buen sofá, un buen colchón o unos muebles de calidad, nuestra recomendación es que lo hagas. Con los cuidados adecuados, te durarán muchos años. 

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6. 'Decora el baño en blanco'

Sí, el blanco ayuda a regalar amplitud, luminosidad, ofrece un efecto más limpio y es una opción atemporal. Pero también puede resultar aburrido y dar sensación de hospital.

Y es que introducir el color en el baño no está reñido con ninguna de esas características de las que presume el color blanco. Para ello el beige o el gris claro es una muy buena opción, ya que ofrece también un matiz cálido sin renunciar a ninguna de las ventajas del blanco. 

Puedes añadir un plus de personalidad mediante el material del lavabo, como este de piedra, y un mueble de madera, como ha hecho aquí el equipo de PortobelloStreet.es.  

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7. 'Pon todos los muebles contra las paredes'

Si la estancia es pequeña, puede ser aconsejable apoyar todos los muebles contra las paredes para que el espacio parezca más amplio. Pero no siempre es la mejor opción.

Por ejemplo, si el salón comparte el espacio con el comedor, el sofá puede actuar como elemento que separe los ambientes. Una estantería o un sofá rinconera cumplirá la misma función.

Y, por supuesto, si vives en un loft, emplear el mobiliario para crear paredes falsas será todo un acierto para contar con cierta intimidad. 

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8. 'Aquí te faltan cojines'

Pocas cosas hay más personales que el número de cojines que decoran tu sofá o tu cama. Y puede que mientras muchas personas piensen que te faltan cojines, tú estés pensando: "¿Y qué hago con ellos cuando me siento en el sofá?, ¿los tiro al suelo?". 

Lo ideal es que coloques tantos cojines como necesites o vayas a utilizar. ¡E ignora los comentarios!

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9. 'Pon las mesitas de noche a juego'

No, no hace falta que las mesitas de noche vayan a juego. Ni siquiera hace falta que haya dos. Huye de la simetría total con mesitas de noche diferentes o colocando un elemento que se salga de la norma. Por ejemplo, una pila de libros dará al dormitorio un aire bohemio, con una silla conseguirás un aspecto vintage. ¿Que necesitas más almacenaje? Olvídate de la mesita de noche y apuesta por una cómoda. ¡Hay muchísimas opciones para dar a tu casa ese punto de personalidad que andas buscando!

Otra opción, si duermes solo, por ejemplo, es colocar un espejo de pie al otro lado de la cama, como en esta propuesta del interiorista Alberto Aranda. 

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