Arquitectura tradicional de la zona rodeada de un extenso prado de 17.000 metros cuadrados, a tres kilómetros de Llanes y de sus playas y a los pies de la sierra del Cuera. Construida expresamente por el naturalista y viajero Sirio Sáinz, esconde tras su fachada de piedra con grandes ventanales y galerías acristaladas, unas luminosas y cálidas estancias que integran el interior con la naturaleza circundante. Las habitaciones se asoman al campo, algunas tienen salida directa al jardín y otras están comunicadas entre sí, por lo que son ideales para familias. El mobiliario art déco, los recuerdos de familia y viajes y otros enseres de los años treinta del pasado siglo, combinados con acierto con adornos contemporáneos, son los protagonistas de la decoración. En el restaurante se sirve cocina asturiana con toques cosmopolitas.   El hotel no tiene barreras arquitectónicas (en planta baja)". Pertenece al club de Calidad Casonas Asturianas.

Instalaciones:

Piscina, servicio de habitaciones y canguro, conexión wifi, biblioteca de viajes, rastrillo de muebles antiguos y motos y bicicletas de montaña y admisión de animales de compañía en las habitaciones

Alrededores:

Llanes y playas del concejo, Covadonga y Parque Nacional de los Picos de Europa y Cuevas del Pindal y Tito Bustillo