Bristol es una ciudad idónea para los jóvenes, ya que goza de gran vida estudiantil, cuenta con mucho ocio nocturno y dispone de una amplia oferta cultural y calendario de eventos que dirige su mirada, principalmente, hacia el arte y la música. 

Su nightlife es mundialmente conocida. Con el drum and bass en cabeza, cuenta también con diferentes ambientes en los que bailar a ritmo de electrónica, música comercial o conciertos de jazz y soul en directo. ¿Lo mejor? La entrada suele ser gratis.

The Full Moon es uno de los emblemas más bristoleños. Un lugar en el que tomar algo, cenar y, también, bailar hasta altas horas de la noche.

Bristol destaca por su amplia oferta gastronómica. En St. Nicholas Market encontrarás un mercado de comida callejera muy internacional y variado. En el resto de sus calles también, pero sobre todo, verás mucho bar y restaurante de comida healthy, orgánica y de proximidad.

La economía circular es uno de los pilares allí. Por eso a cada paso aparece una tienda de ropa vintage y, es difícil, encontrarse alguna franquicia.

Más allá de ofrecer varios tours sobre su arte callejero (como el que recorre la obra de Banksy), Bristol cuenta con graffitis y murales pintados casi en cada esquina. Además su oferta de galerías y museos es generosa.

Hay fechas señaladas, como el St. Pauls carnival que atraen cada año a un gran número de visitantes a la ciudad.

Si hubiera que destacar un evento mundialmente conocido, este sería e Balloon Fiesta.