A solo 3 minutos andando del Museo Gargallo, que ocupa un palacio renacentista situado en la plaza de San Felipe y dedicado de forma monográfica a la obra de este gran escultor aragonés, se encuentra el Méli del Tubo (melimelozaragoza.com), uno de los locales con más ambiente en la zona de tapeo por excelencia de la capital aragonesa, la que conforman las calles Mártires, 4 de Agosto, Cinegio, Estébanes y Libertad. Dos plantas donde podemos tomar tapas y raciones modernas, tanto saladas como dulces, elaboradas al momento, pero también café a media tarde o una copa o un cóctel después de cenar. Entre su variedad de deliciosas propuestas, hay que probar sí o sí, la tapa Cave Ovum, un saquito crujiente relleno de setas, bacon y huevo sobre carbonara de torrezno que se come de un bocado y es una auténtica explosión de sabor y textura.
Pueblos aragoneses que son especialmente bonitos