Apúntate a un fin de semana ‘etno’ en Alcalá la Real

Aprovecha que del 19 al 21 de julio se celebra el festival ‘Etnosur 2013’ para conoceresta populosa y animada ciudad jienense coronada por su deslumbrante fortaleza de la Mota.

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Hay dos ocasiones especiales para acercarse a Alcalá la Real este verano. La primera es a mediados de julio cuando tiene lugar el festival Etnosur (Encuentros Étnicos del Sur), una cita musical, cultural y festiva que ofrece conciertos de música étnica y alternativa, muestras de artesanía, talleres, exposiciones, cuentacuentos, proyecciones de películas, conferencias y mesas redondas sobre la realidad del mundo... La segunda es en agosto, cuando Alcalá presenta las Noches de La Mota, las veladas literarias que se celebran en el patio de armas de la fortaleza en torno a la cual fue creciendo esta ciudad. Aunque siempre está la ocasión, en temporada estival, de asistir, en este mismo escenario, a las recreaciones históricas que escenifica una compañía de animación.

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La Mota fue ciudadela, alcazaba, fortaleza y, tras la conquista, sede de una de las iglesias abaciales más monumentales de la Andalucía de interior, que guarda en su torre del homenaje un museo. Su ubicación es una excentricidad. Se alza en el límite geográfico que une y separa Jaén, Granada y Córdoba. Desde sus alturas se divisan los relieves montañosos de Sierra Nevada y los horizontes planos del antiguo reino nazarí de Granada, al que estuvo íntimamente unido. Aquí arriba es más fácil comprender el significado que Alcalá la Real tuvo como marca y frontera.

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A los pies de La Mota, Alcalá la Real se muestra como una ciudad populosa y animada. La calle Real se topa de frente con la iglesia de Consolación, donde se venera a la Virgen de las Mercedes, que aquí tiene mucho predicamento. A la Carrera de las Mercedes, donde abre sus puertas el Palacio Abacial, asoman casonas señoriales, barrocas la mayoría. En una de sus bocacalles nació Juan Martínez Montañés, el célebre escultor imaginero que creó escuela artística en Sevilla y al que se deben algunas de las tallas religiosas más señaladas del barroco español.

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A esa solidez artística une Alcalá la Real un punto pintoresco en el barrio de las Cruces, trenzado de calles estrechas y casitas encaladas por primavera. Entre ellas abren miradores perfumados con rosales y geranios. Es un barrio sensorial, primitivo, que retrotrae mejor que ningún otro lugar a la ciudad medieval. Hay quien dice que en Alcalá la Real nació el autor del Libro del Buen Amor. ¿Sería así como Juan Ruiz, el Arcipreste de Hita, recordaría su ciudad?

GUÍA PRÁCTICA

DÓNDE DORMIR

Torrepalma (hoteltorrepalma.com). Establecimiento funcional al lado del paseo de los Álamos y del centro de la ciudad, con un buen restaurante de cocina tradicional.
Sierra de la Martina (hostalrestaurante-sierradelamartina.com), en La Hoya de Charillas.. Alojamiento rústico, con habitaciones familiares, a unos diez kilometros de Alcalá.

DÓNDE COMER

El Rey de Copas (Ctra. de los Frailes, 27. Ribera Alta, Alcalá la Real. Tel. 953 59 33 05). Un clásico de la gastronomía tradicional con toques muy vanguardistas en sus platos.
Casa Kisco (Av. Iberoamérica, 9. Alcalá la Real. Tel. 953 58 38 01). En su pequeño y cuidado comedor se ofrece una cocina popular con detalles.
Torrepalma (hoteltorrepalma.com). Cocina casera y de mercado. No faltan los vinos de Alcalá y Frailes y hasta una cerveza tradicional conocida como Tierra de Frontera.

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