Un exótico viaje por los más evocadores ‘hammam’

Deja de imaginar, porque te vamos a guiar por los mejores baños árabes de Andalucía. Una experiencia singular para que descubras y, por supuesto, sientas, la fascinación del mundo islámico.

by hola.com

Piensa en un lugar mágico, con luz tenue y cálida, música suave, zona de baños, masajes, olor a jazmín... Respira y empieza a relajarte, porque lo que estás imaginando tiene mucho que ver con un hammam, el baño público en el mundo islámico y uno de los centros principales de su vida social. En la España medieval existían numerosos hammam que eran usados tanto por hombres como por mujeres, a ellos acudían a eliminar tensiones y a limpiar el cuerpo, pero también a reunirse, descansar y relacionarse.

En general, los baños árabes solían contar con distintas estancias. La sala principal, que ocupaba el centro, era la templada, además de la estancia más grande, y donde la gente pasaba mayor cantidad de tiempo. En la sala central, a la que se accedía tras pasar por la sala de masaje o la sala de vapor, era un lugar de relax, para beber o para conversar.

La mayoría de los hammam de hoy en día siguen conservando buena parte de su esencia original, es decir tienen en común recuperar la paz del cuerpo y el alma, a la que se han añadido en muchos casos sala de masaje o tetería. Pero más allá, son una fiesta para los sentidos, lugares que brindan una experiencia singular en un ambiente exótico. En España existen 18 hammam donde olvidarse del bullicio cotidiano, la gran mayoría en Andalucía. Te invitamos a recorrer algunos de los más evocadores:

Aire de Sevilla
Ocupa un antiguo hammam, posteriormente transformado en casa palacio, en pleno barrio de Santa Cruz. Luz tenue, azulejos árabes y lámparas de bronce ambientan las distintas salas de agua que conforman el recorrido. Tiene una terma de agua salada, una sala de mil chorros y un hammam, aunque la sensación más interesante se consigue en la sala de aguas, con termas a diferentes temperaturas.

Hammam Andalusí
En una pequela callejuela del casco histórico de Jerez, muy cerca de la catedral, se ubica este hammam cuya visita constituye toda una experiencia tanto por sus tratamientos (con chocolate o aloe vera natural) como por el edificio en el que se ubica: una casa-palacio del XVIII, rehabilitada según técnicas artesanales tradicionales. No te pierdas tomar un baño andalusí, que incluye exfoliación corporal, baño de arcilla, mascarilla facial y masaje.

Agua de Oriente
La arquitectura nazarí granadina del siglo XI ha inspirado este hammam, cuyos tratamientos están enfocados a tratar dolencias tan variadas como los esguinces, el estrés y hasta la depresión.

Medina Califal
Los masajes son los grandes protagonistas en este hammam y pueden combinarse, incluso, con tés y repostería árabe en la tetería del establecimiento. En esta recreación de un hammam de época califal, el contraste de temperaturas de sus diferentes salas, el baño turco y la piedra caliente facilitan el descanso.

Hammam de Granada
No podía haber un mejor lugar en Granada para un hammam que a los pies de la Alhambra, en el antiguo barrio del Albaycín. Ocupa un edificio del siglo XIII y su estructura invita a pensar que el inmueble se ubica en un antiguo hammam. Tras el paso por las distintas salas que componen el baño árabe, puedes optar por un masaje con esencias aromáticas, un masaje tradicional o el ritual Al Andalus.

Más información
Baños Árabes

Más sobre: