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Dicen que es uno de los lugares más románticos del mundo. Sobre lo alto de una verde colina, con fantásticos jardines en terrazas, una fachada atribuida a Miguel Ángel y unas vistas excepcionales sobre Florencia, Villa San Michele reúne todos los ingredientes para serlo. Hoy, este antiguo monasterio erigido en el siglo XV por los franciscanos no sólo es un exquisito hotel donde perderse unos días para conocer la ciudad del Renacimiento, también es un lugar donde sus cursos de cocina se han convertido en el reclamo para vivir unas auténticas vacaciones de lujo culinario.

Desde que su escuela de cocina comenzó a funcionar hace ya seis años, por las manos del chef Attilio Di Fabrizio han pasado todo tipo de aprendices: parejas con ganas de vivir juntos una experiencia divertida, grupos de amigos con ganas de aprender los secretos de la pasta casera y al dente, novatos de esos que nunca se han acercado a los fogones, y también niños que hacen sus primeros pinitos en la cocina.

Precisamente a los menores de ocho a catorce años está dirigido uno de los cursos de cuatro días de duración que, desde mediados de este mes de mayo y hasta el próximo mes de octubre, están programados en este lujoso establecimiento. Durante las clases de cocina los niños reciben información sobre nutrición y aprenden a agudizar los sentidos, a reconocer los alimentos frescos, a cocinar ‘de verdad’. Además de despertar su curiosidad, el curso tiene una ventaja adicional: la oportunidad de visitar Florencia dejando así a los padres con tiempo libre para relajarse.

El antiguo secadero de limones de los monjes es el escenario de estos breves cursos en los que cada participante, supervisado por el chef, prepara con sus propias manos el entrante, el plato de pasta y el postre que más tarde disfrutará junto a los compañeros de fogones en el restaurante, que ocupa la aristocrática loggia de la villa.

El más breve de los programas, de apenas una mañana y siempre para grupos de un máximo de diez personas, está también abierto a quienes no tienen la fortuna de alojarse en el hotel. En poco más de dos horas Attilio Di Fabrizio, con veinte años como chef en la cadena Orient-Express y dueño y señor de un estupendo castellano, enseña cada lunes, jueves y sábado a preparar platos tan fáciles de hacer una vez de regreso a casa como por ejemplo las típicas panzanellas toscanas, unos ñoquis de patata amasados rigurosamente a mano y acompañados de una deliciosa e increíblemente sencilla salsa de tomate y albahaca y, de postre, cómo no, tiramisú.

Ya sí exclusivamente para sus huéspedes, el solicitado curso Sinfonía de la Pasta incluye, además de cuatro noches de alojamiento, una clase de cocina con Di Fabrizio para concentrarse en las especialidades toscanas, otra con el chef Domenico Di Raffaele del hotel Caruso de la Costa Amalfitana para experimentar con las recetas más mediterráneas del sur de Italia, otra con el chef Corrado Corti, del hotel Splendido de Portofino y una última con el chef del veneciano hotel Cipriani, Renato Piccolotto, para familiarizarse con los sabores del Véneto.

También programadas a lo largo del año, breves incursiones en los vinos locales de la mano de un sumiller, cursos para singles con voluntad de comer rico sin pasar horas en la cocina y, como novedad de la próxima temporada 2010, las jornadas El corazón en un plato, en las que un chef, un cardiólogo y un inmunólogo se confabulan para orquestar menús de lo más saludables pero tan apetitosos que hagan exclamar aquello de “Buono Buonissimo!”

GUÍA PRÁCTICA

Cómo llegar
Villa San Michele, con sólo 46 habitaciones se levanta entre los jardines y bosques de la colina de Fiesole, a un cuarto de hora del casco histórico de Florencia y con transporte gratuito hasta éste varias veces al día para sus huéspedes.

Cursos
El calendario, precio y descripción completa de los cursos de cocina se pueden consultar en su página web. El primero es Una sinfonía de pasta de tres autores y tendrá lugar del 13 a 16 de mayo, a éste le siguen del 23 al 28, Intermezzo Italiano y la escuela de cocina para niños, del 3 al 6 de junio. El más breve, de sólo una mañana y abierto también a personas no alojadas en la villa, cuesta 170 € por persona e incluye la clase con el chef y una comida en el restaurante con los platos que se hayan aprendido preparar. La novedad para 2010 será el curso El corazón en el plato, por 1.869 € por persona en habitación doble, con las clases de cocina saludable en compañía del chef y un par de especialistas en nutrición, así como tres noches de alojamiento.

Más información
Villa San Michele