De estrambótico a sobrio: la evolución del makeup de Lady Gaga
De una Mother Monster a una glamorosa estrella de cine, la celeb no teme arriesgar con su maquillaje ni mostrar su belleza al natural
Fascinante. Así ha sido la transformación de Lady Gaga durante la última década, y esto no solo se evidencia en su estilo al vestir; también en su maquillaje. Desde que irrumpió en la escena musical en 2008 con su dance pop, la camaleónica estrella ha evolucionado ante nuestra atenta mirada, pasando de los makeup looks más extremos –muy coloridos e incluso con prótesis faciales– a los selfies al natural o a la estética lady like en la última temporada de premios.
Sin dejar de imponer tendencias, ni resaltar su belleza, la artista es hoy un icono que revalida su estatus en cada nueva aparición, videoclip o –como ya es usual en estos tiempos– con el lanzamiento de su propia línea de cosméticos llamada apropiadamente Haus Laboratories. A continuación, repasamos sus beauty looks más fascinantes.
Poker Face
Al igual que su canción, Gaga empezó con un enigmático juego de rostros en el que combinaba sombras metalizadas, capas y más capas de máscara de pestañas y dibujos en sus pómulos que evocaban el glam rock y el electropop. Imposible de olvidar.
Muñeca colorida
El maquillaje de Lady Gaga siempre está en sintonía con su música, y en 2011 experimentaba al máximo con el color. Prueba de ellos son sus looks más arriesgados, como este que lució en los MTV Awards de Tokio. Cejas marcadas, triple eyeliner y algunos visos drag la distinguía de cualquier otra celeb.
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Clásica y chic
Un giro rotundo hacia lo minimal dio la galardonada artista en 2014 cuando prefirió dejar a un lado los smokey eyes y el contouring en favor de una piel radiante y de un maquillaje neutral, acompañado por un peinado muy a lo Marilyn Monroe. Esta faceta marcó un antes y un después en ella.