Entre los gratos recuerdos de John Travolta existe uno de lo más especial. Una noche de noviembre en la Casa Blanca, en 1985, uno de los actores más famosos de Hollywood y de los hombres más sexys del cine, conocía a la princesa Diana, la carismática y tímida esposa del heredero al trono de Inglaterra. El actor, famoso por sus pasos de baile, invitó a Lady Di a la pista, en lo que se convertiría uno de los momentos más icónicos de la realeza y la cultura pop. 35 años después de ese día, John recordó a detalle cómo sucedió y lo que pensaba mientras los nervios lo invadían al mismo tiempo que se lucía en la pista de baile.

©GettyImages

“No esperaba que me pidieran bailar con ella”, recordó en una reveladora entrevista con Esquire. “Tuve el gran privilegio y el honor de hacerlo. Y pensé: ‘Debe haber una razón para hacer esto y más me vale darlo todo...’”, contó.

Para él, bailar no tenía ninguna complicación, pero acercarse a ella fue lo más interesante: “Esto significaba guiar bien el baile y divertirnos. Esa fue la parte fácil, pero el hecho de presentarme ante Diana de la manera apropiada, transmitir seguridad y pedirle que fuera mi compañera de baile era una misión complicada”.

El cuento de hadas de John Travolta

Bailar con la fallecida princesa de entonces 24 años, fue toda una experiencia para John Travolta. Por ello es que la mantiene entre los más gratos recuerdos de su carrera sin olvidar detalle alguno. “Piensa en el momento. Estamos en la Casa Blanca. Es medianoche. Es como un sueño todo el escenario. Me acerco a ella, le toco en el hombro, la invito a bailar. Ella se da la vuelta y al verme despliega esa sonrisa cautivadora, un tanto triste, y acepta mi invitación”, dijo de lo más sincero.

©GettyImages

“Y ahí estábamos, bailando juntos como en un cuento de hadas. ¿Quién podría imaginar que algo así te va a suceder algún día? Fui lo suficientemente listo para registrarlo en mi memoria como un momento muy especial, mágico”, concluyó sobre la anécdota que sólo él puede contar.

Aquel momento quedó grabado en la historia de la cultura pop, tanto que el vestido largo de terciopelo azul que usó Diana, ha sido subastado en más de una ocasión. En 2019, el tesoro de la moda, diseño de Victor Edelstein, alcanzó los 340 mil dólares en subasta.