No hay plazo que no se cumpla. Para Pablo Lyle llegó la hora de rendir su declaración ante las autoridades en una corte de Miami. En la audiencia de este 22 de agosto, el actor originario de Mazatlán, Sinaloa, apeló a que su actuar se debió a que consideró que su familia estaba en peligro. En esta audiencia, también declararon su esposa Ana Araujo, su cuñado, Lucas Delfino, así como otros testidos que presenciaron el incidente.