El chef de la bodega, Javier Górriz -segundo por la derecha- posa con algunos invitados.
La bodega Otazu, situada a ocho kilómetros de Pamplona ha puesto su granito de arena en la lucha contra el cáncer infantil. El pasado 30 de septiembre invitó a amigos, conocidos y clientes a participar en 'Vendimia por una sonrisa', una jornada en sus viñedos con un objetivo solidario. Y es que toda la recaudación de este día, en el que se hizo mucho más que recoger uva, se donó a dos asociaciones que se dedican a luchar contra el cáncer infantil en Navarra: ‘Niños contra el cáncer’ y ‘Adano’.
Sobre las doce y media de la mañana los asistentes pudieron disfrutar de diferentes propuestas de ocio relacionadas con la actividad vinícola: el pisado de la uva, una visita al interior de la bodega, un paseo en coche de caballos o una cata de los vinos Otazu. Tras una mañana ajetreada repusieron fuerzas con un menú en el que el vino también fue protagonista: milhojas de pasta ‘wanton’ con bogavane del Cantábrico, solomillo a baja temperatura con crema de robuchon y reducción de altar y fluido de turrón con chantilly, helado de vainilla y Vera Cruz. El broche oro lo puso, ya por la tarde, el monólogo ‘Tu gin perfecto y Macallan’ y la actuación musical del grupo flamenco Son de Ases.
‘Niños contra el cáncer’ es un proyecto de la Clínica Universidad de Navarra que nació para encontrar solución a los casos de cáncer infantil que aún no la tienen. ‘Adano’, por su parte, es una ONG integrada en la Federación Española de Padres de Niños con Cáncer, que nació por iniciativa del doctor Javier Molina Garicano, responsable del servicio de oncología hematológica pediátrica del Hospital Virgen del Camino de Pamplona.
Guillermo Penso -en el centro, de negro-, director general de Bodega Otazu, con invitados a la Fiesta de la Vendimia Solidaria.
Los invitados pudieron pasear a caballo por los alrededores de la bodega.
Los asistentes no se fueron sin paladear los vinos de la bodega.
Javier Górriz, chef de Bodega Otazu, posa con con algunos invitados en los exteriores de la bodega.
Estas suculentas ostras fueron uno de los manjares que pudieron degustar los asistentes a esta jornada.
Sombreros para que los invitados se protegieran del sol.
José Luis Ruiz, enólogo de Bodega Otazu, acompañó a los invitados en la visita a las instalaciones.
¡Un brindis por esta jornada solidaria!
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