Miopía, hipermetropía, astigmatismo... ¿cuáles son sus diferencias?

Nos acercamos a los problemas más comunes de la vista con la ayuda del experto Juan Carlos Mora de Oñate

Por hola.com

Tal vez la miopía es una de las afecciones más conocidas de la visión, pero ¿sabe cómo se manifiesta? ¿Y cuáles son los síntomas de la presbicia? Hemos querido acercarnos a cuatro de los problemas más habituales de la visión y, para ello, hemos contado con el asesoramiento de Juan Carlos Mora de Oñate, Óptico-Optometrista de Óptica Roma, en Madrid. Para empezar a hablar sobre los problemas visuales, relacionados con la graduación, hay que tener claro que no son unos independientes de otros, y que se pueden dar más de uno a la vez. No sólo en el mismo ojo, sino que incluso hay casos en los que un paciente puede tener miopía en un ojo e hipermetropía (que es justo lo contrario) en el otro. "Una vez hecha esta primera aclaración, voy a intentar describir de una forma sencilla lo que significa la miopía, la hipermetropía, el astigmatismo y la presbicia (o vista cansada)", explica.

Miopía. Es el problema visual más común de todos; tanto, que se calcula que cerca del 26 % de la población española tiene miopía. El síntoma más claro es tener visión borrosa de lejos, y se acentúa más por la noche. La razón fisiológica de este problema es que el ojo es más grande de lo normal.

Para corregir la miopía se pueden usar gafas o lentes de contacto. Lo ideal en los casos de miopía superior a 1 dioptría es tener dos gafas, una para trabajar de cerca o media distancia (ordenador) y otra para ver de lejos, conducir, ir al cine o ver la televisión. La primera, la del trabajo, con menos graduación, que hará que la visión sea más cómoda y frenará la subida de la miopía, y la gafa de lejos con la graduación exacta, que dará una visión muy nítida de lejos, fundamental para actividades como la conducción. En general, hasta ahora, la gente ha sido reacia a tener dos gafas, y a lo que se tendía era a poner la menor graduación con la que se alcanzara una visión de lejos suficiente, dependiendo de las necesidades de cada uno. Concretando, los miopes de más de 1,5 dioptrías necesitan gafas para ver a media distancia, ya que en general la visión empieza a ser borrosa.

Además, también es una alternativa la cirugía refractiva. Estos últimos años ha tenido mucha aceptación y son muchos los pacientes que han optado por esta solución para corregir la miopía. Los resultados están siendo muy buenos, y el consejo de nuestro experto es siempre acudir a un oftalmólogo especializado en esta área, que nos haga una valoración a fondo de nuestro caso y nos aconseje.

Hipermetropía. Es el efecto contrario a la miopía, suele aparecer en ojos algo más pequeños de lo normal, los síntomas suelen ser cansancio y/o dolor de cabeza cuando se trabaja de cerca, y si la hipermetropía es más alta también afectará a la visión de lejos. Se calcula que en España tiene hipermetropía alrededor del 10% de la población.

En este caso, la mejor solución son las gafas, ya que en general no hace falta llevarlas todo el día puestas. Y si la hipermetropía es superior a 1,50 dp también es posible usar lentes de contacto.

Aunque también se puede operar cierta cantidad de hipermetropía, en general no es la mejor de las soluciones.