Las segundas residencias se convierten igual que para todos en el mejor destino de vacaciones de las familias reales durante este verano incierto. Marivent, Balmoral, Cabasson, Toscana, Cayx, Mågerø, Solliden..., un oasis estival, ofrecen este año a reyes y príncipes más expectativas que nunca del merecido y necesitado descanso después de meses de confinamiento. A falta de otros viajes, les invitamos a un tour por las propiedades reales.
Marivent, un trozo de cielo en la tierra para nuestros Reyes
La imagen de la Familia Real disfrutando de sus vacaciones estivales ha quedado indisociablemente unida a la del Palacio de Marivent, la moderna construcción del arquitecto Guillem Forteza que hace alusión en su nombre a su conjunción perfecta de mar y viento y que se encuentra en el enclave turístico del barrio costero de Cala Major, en la isla de Mallorca. Desde su amplia terraza, abierta a un precipicio sobre el mar, domina una impresionante vista de Palma, “un trozo de cielo en la tierra”, en palabras de Felipe VI, un pedacito divino de la ciudad que se siente orgullosa de ofrecer a la Familia Real su residencia estival. Por muchos veranos.