Victoria de Suecia ha entrado de lleno en la recta final de su embarazo. Todos están pendientes de su estado e impacientes por arrancarle al calendario el número preciso de hojas para conocer al primer hijo de los duques de Västergötland, que agota sus últimas semanas o días, tal vez horas, en el vientre materno. Así, mientras llega el caprichoso momento del nacimiento del futuro heredero, se desata en Suecia la fiebre por conocer sobre el particular todos los detalles.
Aunque no se espera que la princesa dé a luz hasta principios de marzo, ya han comenzado los preparativos para el parto. La Casa Real sueca no ha confirmado hasta ahora en qué hospital será ingresada la princesa Victoria, si bien todo apunta que el centro elegido es el Hospital Universitario Karolinska de Estocolmo, el más prestigioso del país. Según recogen varios medios suecos, durante el fin de semana, el Karolinska -situado en Solna, al norte de la capital- ha reservado una amplia zona de aparcamiento junto a la sala de partos, supuestamente para el gran número de periodistas, incluidas unidades móviles de televisión, que se espera acudan a cubrir el nacimiento del nuevo heredero sueco. Además varias patrullas de policía acudieron ayer al Karolinska para preparar y planear cortes de tráfico y que las ambulancias puedan acceder al recinto sin problemas, según la agencia sueca TT, aunque las autoridades suecas mantienen el mutismo al respecto. A pesar de todo, el hospital dice no saber nada sobre dónde será ingresada la princesa.
