La boda de la princesa Victoria tampoco será en 2009, para desdicha de la princesa Magdalena

Por hola.com

Las tiranteces entre Victoria y Magdalena de Suecia de las que hablábamos la semana pasada tenían, al parecer, razones profundas. Y es que pinta mal el panorama nupcial para la princesa Magdalena, según las informaciones del periódico Aftenbladet, si pretende contraer matrimonio lo antes posible después de su hermana, la princesa Victoria. Porque la Heredera no parece decidida a dar el paso, al menos, en 2009, como se esperaba en el país escandinavo, y su hermana quiere hacerlo lo antes posible para ser mamá. La primogénita de los Reyes suecos ha decidido esperar debido, en parte, a que Daniel Westling no termina de adaptarse al medio principesco: ni le gusta viajar, ni tiene ningún interés en cortar lazos (de inauguraciones, se entiende), ni tampoco le atraen las cenas de gala.

A pesar de que el Ministerio de Asuntos Exteriores solicitó hace meses un presupuesto mayor para la "preparación de una boda real", la princesa Victoria ha decidido conscientemente que no sea Daniel Westling, por el momento, el hombre que la acompañe el resto de su vida. Según varias personas próximas a la corte no habrá boda hasta dentro de unos años y una gran parte de ellas ni siquiera está segura de si la habrá. "Pese a lo que muchos creen no hay ningún plan nupcial para el año que viene", dice al respecto una fuente cercana a la familia.

Para la celebración de un enlace real es necesario poner en marcha con antelación los preparativos. Hay que invitar a miembros de la realeza y dignatarios de todo el mundo, elaborar un extenso plan de seguridad y la televisión debe también planear la cobertura del evento. Ninguna de estas cuestiones está en proceso, como asegura la jefa de prensa de la Casa Real, Nina Eldh, al confirmar que actualmente la boda no figura entre sus proyectos de trabajo: "No hay ninguna información sobre algo así".

Ni a Daniel gustan los actos oficiales, ni a los Reyes, Daniel
El motivo de la demora de la boda es, según fuentes próximas a la corte, que Victoria y Daniel, después de casi siete años juntos, tienen todavía dos problemas que deben solucionar antes de que él pueda ser miembro oficial de la [Familia Real sueca]: Daniel Westling no se siente cómodo en los actos oficiales, y prefiere estar en un campo de golf, en la naturaleza o en el trabajo y, por otro lado, los Reyes no respaldan completamente la elección de su hija, aunque no lo exterioricen, y prefieren no presionarla con el matrimonio para que no se case con Daniel.

"No es él como persona lo que les genera dudas. Lo que pasa es que el Rey ve un problema que Victoria se case con un sueco común", sostiene Catarina Hurtig, reportera de la realeza de Aftonbladet. Pero si hay alguien a quien no le agrada la demora de la boda es a la [princesa Magdalena]. Las hermanas han discutido la cuestión muchas veces, y varias puertas del palacio de Drottningholm han sido cerradas a portazos. Según las mismas fuentes, la princesa Magdalena quiere tener hijos con su novio, Jonas Bergström, pero las normas de la realeza prohíben un embarazo fuera del matrimonio. "No hay ninguna regla acerca de que la Heredera deba casarse antes que su hermana. En Dinamarca, por ejemplo, el [príncipe Joaquín] se casó casi 10 años antes que el [príncipe Federico], pero tengo entendido que la corte quiere que la [princesa Victoria] sea la primera. Es un chasco para Magdalena, a la que le encantan los niños", afirma Hurtig.