Mette-Marit de Noruega decidió pasar por el quirófano el pasado 19 de marzo para someterse a una intervención de cirugía menor que de una vez por todas pusiera fin a las numerosas molestias que padecía “desde hace bastante tiempo” y, tras su convalecencia, ha retomado su agenda oficial con una gira por los países bálticos.

Mette-Marit de noruega y la Primera Dama de Letonia daban la mejor imagen de sus países, de sus florecientes relaciones bilaterales, a base de ricos encajes y brocados en la alfombra roja. 

Antes de volver al trabajo, los príncipes Haakon y Mette-Marit, futuros Reyes de Noruega y matrimonio feliz a punto de cumplir los 17 años de amor, hicieron una escapada a Puerto Vallarta (México) para disfrutar de unos días de playa y sol, como recogía la revista ¡HOLA! esta semana en sus páginas.

Los Herederos comenzaron su gira por los países bálticos en Letonia, donde fueron recibidos con honores por el Presidente de la República, Raimonds Vējonis, y la Primera Dama, Iveta Vējone, en la tradicional ceremonia de bienvenida oficial en la residencia presidencial, el Castillo de Riga. 

Los príncipes Haakon y Mette-Marit hicieron su particular contribución a la Estantería del pueblo, una repisa de cristal a la que todo el mundo está invitado a colocar su libro favorito: llevaron Corazones de gofre, de la archipremiada escritora infantil Maria Parr. 

Los Herederos noruegos pusieron broche a su visita a Letonia en una cena en su honor en el Castillo de Riga.

Mette-Marit de Noruega, blanca y radiante.

El Príncipe heredero aprovechó la oportunidad para felicitar a Letonia en el centenario: “Letonia tiene una historia de orgullo, pero los letones han conocido también tiempos difíciles y muy difíciles. La determinación de los letones de conseguir la independencia de su país ha sido notable. Me complace felicitar a Letonia en su Centenario y celebrar estos 100 años desde su declaración de independencia”. 

Haakon y Mette-Marit de Noruega a su llegada a Lituania. La Princesa aterrizó con un atuendo informal y las gafas de sol de última tendencia (redondas y con cristales de color rosa), luego se cambiaría para la tradicional ceremonia de bienvenida oficial. 

Los príncipes Haakon y Mette-Marit conversan con la Presidenta de Lituania, Dalia Grybauskaitė, durante el tradicional recibimiento oficial. La Princesa lució para su primer encuentro con la mandataria una levita blanca con zapatos de tacón de color beis que, debido a sus problemas de cervicales, cambió por otros planos del mismo tono en los compromisos posteriores.

Los príncipes Haakon y Mette-Marit atienden las explicaciones de la Presidenta de Lituania durante su encuentro en el Palacio Presidencial.

La princesa Mette-Marit sostiene uno de los regalos que la Presidenta de Lituania les obsequió como agradecimiento a su visita. 

Haakon y Mette-Marit de Noruega recorrieron el casco antiguo de Vilna hasta la Casa de las Impresoras. Aquí fue donde se firmó la declaración de independencia de Lituania en febrero de 1918, un documento histórico que  se conserva hoy. La exposición cuenta la historia del despertar nacional a principios de 1900 hasta la reconstrucción como una nación independiente en 1918. La propia Presidenta de Lituania mostró la declaración de independencia a sus invitados de honor. Para este paseo por la capital lituana, conocida como la Roma del Báltico, la Princesa apostó por la comodidad de un calzado sin tacón.