Después de unas agradables vacaciones en familia en la costa napolitana de Amalfi, donde la [princesa Carolina], su esposo, el Príncipe de Hannover, y sus cuatro aprovecharon para navegar en el barco de unos amigos italianos y visitar los lugares más emblemáticos, Andrea Casiraghi y su novia, Tatiana Santodomingo, optaron por continuar su asueto independientemente con una escapada romántica a la cala di Volpe, Cerdeña. La pareja disfrutó de jornadas de ocio y relax al sol en la isla del Mediterráneo, famosa por sus extraordinarias zonas turísticas y por sus magníficas playas, y lució como nadie su estudiado desaliño, camuflados por gafas de última moda.
La pareja, que vive su tercer año de amor, mantiene una relación consolidada y bendecida por ambas familias. Tatiana está tan integrada en los Grimaldi-Casiraghi que es considerada una más y no falta a ningún acontecimiento ni vacaciones familiares del clan. Andrea también conoce a su familia política y mantiene una magnífica relación con ella. Se le ha visto, de hecho, en alguna ocasión de copas con su suegro -durante la fiesta que la firma de joyería Chopard celebró el año pasado para presentar su última colección en el marco de la Semana de la Moda de París.
Aunque por las venas de la joven colombiana no corre sangre azul, a los Santodomingo se les considera los Kennedy de Colombia. Es decir, lo más cercano a una Familia Real que tiene el país. De ahí la educación elitista que ha recibido Tatiana, que ha acudido a las escuelas más prestigiosas europeas, donde se labró su amistad con [Carlota Casiraghi], dicen que la promotora de este romance. Tatiana es hija de Alejandro Santodomingo Dávila, presidente de la cervecería Bavaria. Su abuelo Julio Mario Santodomingo fue el fundador del grupo del mismo nombre, que, entre otras cosas, comprende la compañía de aviación Avianca y la Fundación Mario Santodomingo, la cual promueve diversos programas de desarrollo social, vivienda y creación de microempresas. A Andrea se le considera toda una promesa en el Principado, más aún teniendo en cuenta que Alberto de Mónaco sigue sin dar un heredero al Trono.
