Lo más llamativo de la conexión que han llevado a cabo ha sido, sin embargo, el conjunto de detalles que rodeaban a la pareja. Detrás de la duquesa de Cambridge -que ha elegido un vestido de cuadros a modo de significativo guiño- y de su marido podíamos atisbar varios retratos familiares tanto de ellos dos como de sus tres hijos, George, Charlotte y Louis