Si el viaje a Canadá de los duques de Cambridge ha sido todo un éxito, su llegada a Los Ángeles (California) no podía ser menos. Guillermo y Catherine fueron recibidos con todos los honores como si de dos estrellas de Hollywood se tratara y fueron los protagonistas indiscutibles de una recepción ofrecida por la diplomacia británica que tuvo lugar en la casa consular en Hancock Park, custodiada por fuertes medidas de seguridad, y a la que estaban invitadas numerosas personalidades del mundo de negocios, la política y la sociedad californiana.
La pareja lleva muchos días fuera de casa y echarán de menos su vida en Inglaterra, sin embargo, para sentirse como en casa contaron con la ayuda de un compatriota de lujo, David Beckham. El futbolista inglés, que el pasado mes de abril acudió a su boda en la abadía de Westminster acompañado por Victoria, derrochó elegancia y lució una impecable imagen con un traje de chaqueta negro y corbata de lunares. David, que en esta ocasión no acudió acompañado por su mujer ya que se encuentra en la recta final de su embarazo, recibió a los duques de Cambridge con los brazos abiertos y compartió algunas confidencias con el hijo del príncipe Carlos de Inglaterra, que se mostró muy hablador y distendido con todos los invitados. "Victoria quería venir pero es que está tan cansada... Os manda muchos besos", aseguró el futbolista según recoge el Daily Mail.
Mientras su marido charlaba animadamente con el jugador inglés, Catherine ejerció de perfecta anfitriona y volvió a convertirse en el centro de todas las miradas. Sus estilismos, su cercanía con los ciudadanos y su eterna sonrisa han sido las claves de su éxito en Canadá y la razón por la que ha ocupado las portadas de muchos medios a los que ha conquistado desde el primer día. Fiel a su estilo, la duquesa de Cambridge apostó por un diseño de seda de color verde de Diane von Furstenberg que combinó con zapatos de tacón alto de color 'nude' y clutch de 'animal print' con detalles dorados de la misma firma.
Entre los 200 invitados que acudieron a esta exclusiva celebración también se encontraba el sobrino de la reina Isabel II e hijo de los príncipes de Kent, Freddie Windsor, que acudió con su mujer, Sophie Winkleman, el actor y escritor británico Stephen Fry, Bob Iger, presidente ejecutivo de Disney, o algunos representantes de la Fundación del príncipe Guillermo y el príncipe Harry. Según publica el diario Los Angeles Times, todos coincidieron en una cosa y es que la pareja real se mostró cercana y se tomó su tiempo para saludar a cada uno de los asistentes.
Antes de acudir a la fiesta, Guilermo y Catherine fueron recibidos en el aeropuerto internacional de Los Ángeles (California) por una pequeña comitiva encabezada por el embajador británico en Estados Unidos, Nigel Sheinwald, así como por el gobernador de California, Jerry Brown, y el alcalde de Los Ángeles, Antonio Villaraigosa. Después, el primer acto oficial de la pareja fue un encuentro empresarial diseñado para fomentar las relaciones económicas entre Reino Unido y Estados Unidos, que tuvo lugar en el hotel Beverly Hilton de Beverly Hills. Para esta ocasión, Catherine lució un precioso y sencillo diseño drapeado y con volantes en el cuello de la diseñadora Roksanda Ilincic y completó su 'look' con un clutch dorado de L.K Bennett Natalie.
Los duques de Cambridge viajarán este sábado hasta Santa Bárbara, 150 kilómetros al norte de Los Ángeles, para acudir a un encuentro benéfico de polo en el que participará el príncipe Guillermo, que lucirá una camiseta azul diseñada por la firma británica Wills University Outfitters. Está previsto que algunos famosos del cine como Orlando Bloom, Rosario Dawson y Zoe Saldana se acerquen a ver el evento deportivo, si bien el la gran cita con Hollywood para la pareja británica llegará por la noche. La pareja compartirá cena y alfombra roja con artistas como Jennifer López, Marc Anthony, Nicole Kidman, Tom Hanks o Barbra Streisand en el teatro Belasco de Los Ángeles donde se celebrará la gala BAFTA Brits to Watch para promover los jóvenes talentos británicos en Hollywood. ¿Con qué diseño nos sorprenderá la duquesa de Cambridge?
