La reina Isabel II sobrevivió en 1970 a un intento de asesinato en Australia

La banda intentó que descarrilara el tren real

Por hola.com

La reina Isabel y su esposo, el príncipe Felipe, fueron el objetivo de un intento de asesinato en Australia, según ha revelado un policía retirado, el antiguo comisario Cliff McHardy. Ocurrió hace 40 años, el 29 de abril de 1970, mientras la pareja se encontraba de visita de Estado en dicho país. El plan, muy poco sofisticado en su ejecución, consistió en colocar un gran tronco encima de los raíles de la vía ferroviaria en un paso de montaña en el estado de Nueva Gales del Sur para hacer descarrilar el tren real. McHardy insiste en que las consecuencias podrían haber sido catastróficas de no ser porque el conductor viajaba excepcionalmente lento en aquel momento. Los hechos no se han revelado hasta ahora para evitar poner en entredicho al Gobierno australiano, pero McHardy, que fue el oficial que investigó el caso, ha roto su silencio con el fin de resolver el "mayor misterio" de su carrera, ya que toda su vida se arrepintió de no haberlo investigado con más detalle.

El tren se aproximaba a la ciudad de Lithgow cuando chocó con el tronco, que quedó atrapado bajo el primer vagón y fue arrastrado 200 metros y patinó sobre la vía hasta que se detuvo a escasos metros de un paso a nivel. Afortunadamente la locomotora no descarriló y salió en gran parte ilesa. La policía concluyó que se trataba de un acto vandálico contra la Reina, que acababa de celebrar su 44º cumpleaños, y su marido. McHardy, ahora de 81 años, sostiene que si el tren hubiera alcanzado su velocidad normal habría descarrilado y caído por el terraplén. "Mis investigaciones mostraron que el tronco fue colocado deliberadamente". Según su informe, un tren de seguridad inspeccionó una hora antes la zona sin encontrar nada, lo que hace sospechar que los culpables tenían conocimiento del horario oficial del tren.

McHardy desconoce la autoría del complot, y afirma que tuvo noticias del incidente a la mañana siguiente cuando tuvo la orden de retirar el árbol. La Policía australiana sospechó entonces de simpatizantes en Australia del Ejército Republicano Irlandés (IRA), por aquel entonces inmerso en una campaña de violencia contra el Gobierno británico, pero nunca se logró identificar a los conspiradores.