Harry de Inglaterra y Chelsy Davy han roto su relación

La joven surafricana ha puesto fin a su noviazgo de tres años con el Príncipe argumentando que necesita tiempo para 'forjarse su propia identidad'

Por hola.com

Después de tres años de noviazgo, la relación entre el [príncipe Harry] y la surafricana Chelsy Davy ha llegado a su fin. Según informa la edición digital del diario Daily Mail, la joven, de 22 años, ha decidido distanciarse un tiempo de su pareja con el fin de poder forjarse su propia identidad lejos de la atención mediática que ha venido sufriendo en los últimos tiempos. 'La relación ha finalizado. Ahora, todo seguirá su curso. Harry continuará con su carrera militar y Chelsy con sus estudios', confirmó un asistente de Palacio, según recoge el Daily Mail.

Las últimas semanas se había podido ver a Chelsy por el campus de la Universidad de Leeds -donde la joven se encuentra cursando un master y lugar que eligió buscando estar un poco más cerca de Harry- con semblante triste y caminar taciturno, imagen que contrastaba con la sonrisa y vitalidad que proyectaba en los tiempos más felices de su relación.

Parece ser que el hecho de que el Príncipe decidiera acudir a mediados de octubre a un partido de rugby en vez de asistir a la fiesta de cumpleaños de su novia ha sido algo determinante en la decisión de Chelsy, quien habría realizado una serie de llorosas llamadas al Príncipe la pasada semana, confesándole finalmente a una íntima amiga que el Príncipe estaba de acuerdo con la ruptura temporal.

Una de estas amigas habría declarado al rotativo británico: 'Ésta no es una situación fácil. Chelsy y Harry se quieren mucho, pero ella está viviendo una situación de cambios desde que se vino a vivir a Reino Unido que no han sido del todo fáciles para ella. Chelsy aún le quiere, pero siente que necesita redescubrirse a sí misma como persona, encontrar su propia identidad'.

En los últimos tiempos, la que puede ser ya considerada ex novia del Príncipe Harry ha estado más sola de lo acostumbrado. Con su relación cada día más distanciada, la joven atravesaba el campus de su Universidad con actitud pesarosa. A sus dudas acerca de su futuro amoroso, se habría unido la nostalgia que siente de su soleado y cálido Zimbawe -muy alejado del clima frío y lluvioso de Inglaterra- y la distancia que la separa de su familia, a quien ha dejado en África.