El juez de la investigación sobre la muerte de Lady Diana sostiene que no estaba embarazada

Mohammed Al Fayed insiste en que su hijo y la Princesa de Gales fueron asesinados

Por hola.com

Han pasado diez años desde la muerte de Diana de Gales, pero para muchos las causas del trágico accidente en el que pereció continúan siendo un misterio. Con el propósito de aclarar las circunstancias del fatídico siniestro en el que la Princesa y su novio, Dodi Al Fayed, fallecieron el 31 de agosto de 1997 en el puente del Alma de París, ha comenzado hoy un juicio ante el Tribunal Supremo de Londres, que se prolongará entre cuatro y seis meses. Esta investigación judicial, no obstante, no es un proceso en el que se pronunciará una condena; tan sólo tiene como objetivo encontrar las verdaderas razones que ocasionaron el fatal desenlace.

Las pesquisas realizadas por la policía británica y francesa concluyeron que el impacto se produjo debido a que el conductor manejaba en estado de ebriedad. Fallo que no satisfizo a Mohamed Al Fayed, padre del novio de la Princesa y principal defensor de la hipótesis de que la pareja fue víctima de una conspiración de los Servicios Secretos para impedir que contrajera matrimonio. Al Fayed prometió entonces que no se detendría hasta averiguar lo que realmente pasó: "No descansaré hasta que haya mostrado la conspiración entera. Mi hijo y Diana fueron asesinados salvajemente". Y no ha parado en su empeño a lo largo de los últimos diez años. Así, con ocasión de esta nueva investigación, sus abogados han solicitado por escrito que la reina Isabel II, su esposo, el Duque de Edimburgo, y su primogénito, el príncipe Carlos, testificaran. Y, a su llegada hoy al Tribunal Supremo de Londres, ha vuelto a reiterar que su hijo y Lady Diana fueron asesinados. "Espero justicia. Soy un padre que ha perdido a su hijo. He luchado durante diez años, al final quiero que se haga justicia. Estoy seguro de lo que pasó, yo sé que fueron asesinados", aseguró. También los príncipes Guillermo y Harry, hijos de la Princesa de Corazones, tienen puestas sus esperanzas en esta investigación, que desean que sea "abierta, justa y transparente", para que su madre pueda por fin descansar en paz.

Los interrogantes a los que se intentará dar respuesta
El juez Scott Baker es el magistrado que se encargará de esta pesquisa, retrasada en varias ocasiones hasta zanjar las investigaciones de las policías francesa y británica. En la sesión de hoy, han prestado juramento los once miembros del jurado, seleccionado de una lista inicial de 200 personas que debieron someterse a un cuestionario para averiguar si tenían algún vínculo con el caso o prejuicio que les impidiese ser imparciales durante la investigación. "Deberán borrar de sus cabezas lo que escuchen sobre este caso fuera de la corte", les pidió el juez Baker a los once hombres y mujeres integrantes.

La pesquisa deberá analizar, además de cómo murió la pareja, una serie de teorías vinculadas con el caso: si el chófer Henri Paul, que falleció en el siniestro, conducía bajo los efectos del alcohol; si la princesa Diana temía por su vida; si estaba embarazada; si tenía pensado casarse con Dodi Al Fayed... Las dos últimas han sido tratadas en la sesión de hoy. El juez de instrucción de la investigación ha desmontado el corazón de la hipótesis de la conspiración al descartar los rumores que afirmaban que la Princesa estuviera embarazada de Dodi Al Fayed. Mostró al jurado una foto de Diana con un bañador de estampado felino, que resaltaba una 'incipiente' barriguita, y señaló que la instantánea fue tomada antes de su relación con el millonario egipcio. También ha echado un jarro de agua fría sobre la versión de que la pareja se había comprometido y de que esta era la 'gran sorpresa' a la que Diana había aludido en julio de 1007. La declaración se hizo "antes de que salieran en serio cuando Dodi era aún novio de Kelly Fisher", dijo. Ni el tono ni el contenido con el que el juez ha abierto la pesquisa han gustado a Al Fayed, que le acusó de tener prejuicios. Cierto o no, como dijo Lord Stevens, ex jefe de Scotland Yard, algunos de estos interrogantes, tal vez, "nunca tendrán una respuesta definitiva".