La princesa Beatriz de Inglaterra sufre dislexia

Por hola.com

Cuando un alumno le preguntó cuál era la peor palabra para deletrear para ella, contestó: ‘Algo parecido a ‘psicológico’. Es un poco larga. No entiendo por qué se escribe con ‘p’ al principio. Tengo un gran problema con la escritura'.

La duquesa comentó que su hija, que cumple diecisiete años el próximo mes de agosto, estaba muy ‘orgullosa’ de que todo el mundo conociese ahora su problema con la lectura. ‘Ella me pidió el favor de decírselo a todo el mundo porque es muy importante’, dijo. ‘Otros niños deben saber que obtendrán la ayuda que necesiten’.

Una infancia difícil
Beatriz Elizabeth María Windsor de York, nacida el 8 de agosto de 1988, es la hija mayor de Andrés de Inglaterra y Sarah Ferguson, una chica de dieciséis años con pelo castaño y ojos azules que guarda un gran parecido con su madre. Desde que sus padres se percataron del problema de su hija, ambos se han preocupado por ayudarla, ya que vivían en la misma casa de Sunninghill, cerca de Ascot, incluso después de su divorcio en 1996.

Lo suyo ha sido una lucha constante para superar este trastorno. Beatriz acudía varias veces a la semana al centro de dislexia Helen Arkell en Farnham, Surrey, además de acudir a clase en el colegio Saint George, en Ascot. Por las tardes, para no quedarse rezagada con respecto a sus compañeros, la princesa realizaba sus tareas ayudada por profesores particulares. Un esfuerzo que se vio recompensado al conocer más detalles sobre la vida de la reina Victoria, una de las figuras históricas de la monarquía inglesa que la princesa admira y de cuya hija menor tomaron sus padres el nombre para ella.

Las aficiones de una princesa
Beatriz es una joven que, como la gente de su edad, disfruta con la música y cuenta con un Ipod (un aparato portátil para escuchar música) que lleva a todas partes. ‘No puedo estar sin él’, afirma la princesa. Una afición de la que no se despega ni siquiera cuando acude con sus padres a visitar museos y galerías de arte.

Estos días, la princesa se prepara para ingresar en la universidad, y por eso, además de estudiar día a día, la joven sigue asistiendo a clases en el centro Helen Arkell para mejorar su rendimiento. Pero, en contra de lo que muchos pensaban, no estudiará Historia, sino Fotografía y Diseño. ‘Me llama la atención la obra de David Bailey y Andy Warhol. También me gusta dibujar, con un libro de colorear soy feliz’, dice.