‘Cuando diseñamos el vestido de novia de Diana buscábamos algo que realmente impactara, un diseño propio de princesa de cuento, aquel que todas las jóvenes buscaran cuando contrajeran matrimonio con el príncipe de sus sueños’, cuenta Elizabeth Emanuel. Aquel diseño fue el secreto mejor guardado de la Corona británica hasta el 29 de julio de 1981, fecha en la que la futura princesa de Gales se bajó de la carroza y mostró un espectacular vestido en seda cruda, tafetán y encaje, creado por Elizabeth y David Emanuel, con diez mil perlas naturales y una espectacular cola de casi ocho metros de largo.
Veinticuatro años después de aquella jornada, la vida ha dado muchas vueltas. La princesa de Gales murió en dramático accidente; la pareja formada por Elizabeth y David se rompió y Carlos de Inglaterra formalizará el próximo 8 de abril su relación en una controvertida ceremonia con su eterna enamorada, Camilla Parker-Bowles. La diseñadora del vestido de Diana, junto al que fuera su marido, David Emanuel, se aventura a predecir cómo será el traje de Camilla.
‘No se parecerá nada al vestido de Diana’ La prensa británica ya ha dado el nombre de las diseñadoras encargadas del vestido para Camilla Parker-Bowles. Se trata de Antonia Robinson y Anna Valentine, un dúo en el que la futura Duquesa de Cornualles ha confiado en destacadas ocasiones. Del sombrero se encargará el incombustible Philip Treacy, quien durante años ha visto cómo sus creaciones eran elegidas por la alta sociedad británica.
Elizabeth Emanuel se lanza en una retahíla de teorías y presenta una serie de bocetos en los que prima la sobriedad: ‘Probablemente, el vestido no será ni blanco ni crema, más bien elegirá tonos pastel’. La diseñadora apunta a la posibilidad de un dos piezas escotado, al que acompañará un pequeño sombrero con un velo discreto. ‘Estoy segura de que Camilla no llevará ningún vestido que se parezca al de Diana. Lo garantizo. Será justo lo contrario’. Hasta el 8 de abril no sabremos si la diseñadora de Diana ha acertado en sus predicciones.
