La reina Isabel llama la atención al príncipe Carlos sobre su boda

Por hola.com

Desde que el príncipe Carlos y Camilla Parker-Bowles anunciaran sus nupcias para el próximo 8 de abril, se ha abierto un polémico debate en Reino Unido, realmente incómodo para la [Familia Real inglesa]. Los contratiempos a los que los novios han tenido que hacer frente desde su anuncio de compromiso -cambio de escenario de la boda, posibilidad de que enlace civil no fuera legal...- no han hecho más que agravar la situación y han enfurecido a la [reina Isabel], que se ha visto obligada a llamar la atención a la pareja.

La soberana se reunió la semana pasada con su hijo para adevertirle de que no debía excederse con los festejos de su próxima boda. Le exigió que las celebraciones nupciales fueran discretas, tal y como habían acordado, y que la lista de invitados se redujera al máximo. Y es que, hasta la reprimenda de la Reina, el [Príncipe de Gales] tenía previsto invitar a unas 750 personalidades, entre ellos un gran número de aristócratas y celebridades del mundo del espectáculo.

Boda discreta
Otro de los puntos que se trataron durante aquel encuentro fue la hora en que debían concluir los festejos de la boda. Isabel II insistió en que no debían sobrepasar las seis de la tarde, a diferencia del enlace del príncipe Carlos y la princesa Diana, que finalizó de madrugada. Asimismo, reprochó a su hijo que regalara a su futura esposa como anillo de compromiso una joya que había pertenecido a la Reina Madre, máxima detractora de su relación con Camilla. La soberana fue contundente en su mensaje, tanto que, al parecer, el Príncipe volvió a Clarence House con lágrimas en los ojos.

No obstante, los preparativos de la boda más esperada de la corte británica siguen su marcha y, pese a las diferencias con su hijo en cuanto a la organización del enlace, también la Reina se ha lanzado a preparar diversas cuestiones para el gran día. Así, Isabel II ya ha dado órdenes de que las plegarias que se pronuncian durante los servicios de la Iglesia Anglicana incluyan a Camilla a partir del 8 de abril.

Legislación nupcial, a examen
La aparición del Heredero en un servicio religioso en el pueblo de Badminton coincidió ayer con una nueva mala noticia en torno a su futura boda: la próxima investigación del fiscal general del Estado, Lord Falconer, sobre la legalidad del enlace civil de la pareja. Y es que, al parecer, una ley del siglo XIX no permite el matrimonio civil a los miembros de la Familia Real. De manera que, tal vez, el Parlamento deba modificar la legislación nupcial antes del día 8 de abril.

Para colmo de males, la boda de Carlos de Inglaterra y Camilla Parker-Bowles ha sufrido un nuevo revés después de que el Gobierno estadounidense decidiera no agasajar a la futura Duquesa de Cornwall en la Casa Blanca, "por tratarse de una divorciada" ya que, en opinión de George W. Bush, de firmes convicciones cristianas, lo considera "inapropiado".