Camilla: 'El príncipe Carlos se arrodilló ante mí para pedirme la mano'

Por hola.com

El príncipe Carlos de Inglaterra y Camila Parker-Bowles aparecieron en público por primera vez la pasada noche tras el anuncio de su boda en el Castillo de Windsor. La pareja, relajada y sonriente, charló animadamente con los familiares e invitados a la recepción e, incluso, comentaron detalles sobre cómo se había producido la petición de mano y sobre los planes que tienen previstos para el enlace.

Camilla vestía para la ocasión un elegante traje largo rojo con escote de pico. Sin embargo, el llamativo color no fue lo que acaparó la atención de la noche sino el impresionante anillo de compromiso que lucía la novia: una sortija de platino perteneciente a la [Familia Real inglesa] con un diamante cuadrado incrustado en el centro y tres bandas de diamantes a cada lado que Parker-Bowles, convertida ya en prometida del Príncipe heredero, mostró orgullosa a los invitados a la cena.

Carlos y Camila llegaron por separado al castillo, donde se celebrará su boda el próximo 8 de abril y cuya torre circular se iluminó por orden de la reina Isabel II, para celebrar la buena nueva. Fuera de las murallas del recinto, un numeroso grupo de personas aguardaba bajo la lluvia para ver pasar a los novios. Los prometidos posaron para la prensa y contestaron a algunas preguntas de los numerosos periodistas congregados conociéndose así, al fin, algunos detalles sobre el compromiso.

"Se arrodilló para pedirme la mano"
Era el momento de las cuestiones y de oír, por primera vez, a los futuros esposos hablar del enlace. Camilla, exultante, comentó que el príncipe Carlos, al más clásico y romántico estilo, "se arrodillo ante mí para pedirme la mano". Más tarde, Camilla añadió que la noticia, pese a ser esperada, había causado una "gran sensación en la prensa británica e internacional. En cualquier caso, es una decisión muy meditada y que nos hace muy felices a ambos". De hecho, la futura Duquesa de Cournalles, título que recibirá y que utilizará habitualmente de forma protocolaria tras su boda, confesó durante la fiesta que sólo entonces estaba "empezando a volver a la Tierra".

Luna de miel en Escocia
La cena en el Castillo de Windsor sirvió también para que el Príncipe Carlos confirmara algunos de los detalles del enlace que ya se habían ido conociendo a lo largo de la jornada. El heredero al trono comentó que su segunda boda tendrá lugar en el mismo Castillo en el que celebraron ayer el anuncio oficial de su compromiso. Asimismo, los novios dijeron que consistirá en una ceremonia civil seguida de un oficio religioso en el que el arzobispo de Canterbury, máxima autoridad de la Iglesia Anglicana después de la soberana de Inglaterra, bendecirá el enlace.

El Príncipe de Gales y su esposa pasarán su luna de miel en la finca de Birkhall (Escocia), en una propiedad que perteneció a la Reina Madre.