El sesenta y cinco cumpleaños de la princesa Margarita, la menor de las hermanas de la reina Beatriz, congregó, en Apeldoorn, ciudad donde reside, a la Familia Real holandesa casi al completo. La homenajeada, con una original falda con plumas, que imitaba la colorida cola de un pavo real, y una chaqueta tornasolada en los mismos tonos verde azulados, asistió a la representación de un ballet en el teatro de dicha localidad.
Finalizado el espectáculo, la princesa Margarita brindó con champán junto a los artistas y posó con ellos en una concurrida foto de familia, mientras el público estallaba en aplausos. Desde el patio de butacas, su marido Pieter van Vollenhoven, sus hijos los príncipes Maurits Bernhard, Pieter-Christian y Floris, se unieron a la ovación. La Reina y sus hijos, sobrinos de la Princesa, los príncipes Constantin, con su esposa Laurentien, y Johan Friso, y su mujer Mabel Wisse, tampoco se perdieron la especial ocasión.
Sin embargo esta sólo ha sido la primera de una celebración doble, ya que la princesa Margarita volverá a festejar su cumpleaños el próximo 1 de febrero, en un acto con carácter más oficial en el teatro Royal Carré, en Ámsterdam. El motivo no es otro que el de unir su alegría a la de la Reina que cumple 70 años el día 31 de enero, una fecha significativa que llenará este 2008 de eventos (la mayor parte de ellos están programados para el mes de abril).
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