Tras la celebración, el pasado 19 de noviembre, del bautizo de su segunda hija, Alexia, la [princesa Máxima] de Holanda ha vuelto de lleno al trabajo. Y lo ha hecho con uno de los proyectos que acapara especialmente toda su atención y esfuerzo: la promoción de los microcréditos. Así, con esta causa entre manos, la Princesa ha iniciado esta semana un viaje a Suramérica con paradas en Brasil y, desde el 4 al 7 de diciembre, en su país natal, Argentina, donde la esperan sus dos hijas, Amalia, que está a punto de cumplir dos años, y la pequeña Alexia, de cuatro meses, para desarrollar una serie de actividades relacionadas con este tipo de financiación.
Brasil ha sido el primer destino de esta visita, que la Princesa ha emprendido en calidad de miembro del Grupo de Consejeros para el Año Internacional del Microcrédito, de las Naciones Unidas. Durante su estancia en el país carioca, la princesa Máxima asistió a un briefing sobre microcréditos; a un almuerzo en el exclusivo Club de Jockey de Sao Paulo, el cual recientemente celebró su 130º aniversario, con directores de bancos holandeses, brasileños e internacionales: ABN Amro/Banco Real, ING, Rabobank, Unibanco, Itau, Boston, Banco Popular do Brasil, Caixa Econômica Federal, Banco do Nordeste, Citibank, HSBC, Lemon Bank Banco Multipo, Santander/Banco Río, Bradesco en BBVA; visitó un proyecto del Banco Real en el barrio de Jardim Paraisópolis, así como algunos de los negocios financiados con este sistema -un comercio de materiales de construcción y un salón de belleza-; se reunió en el Centro Comunitario (União dos Moradores e do Comércio de Paraisópolis) con otros representantes de bancos, y asistió a una representación de danza, Milágrimas, del Grupo Ivaldo Bertazzo, ganador del Premio Príncipe Claus 2005, entre otras actividades.
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