Los príncipes de Orange ya viven en su nueva casa, Villa Eikenhorst

Por hola.com
La polémica
La empresa constructora, los trabajadores y otras personas o profesionales relacionadas con la obra firmaron un documento según el cual se comprometían a guardar secreto ante todo lo que viesen. Un "contrato" que alguien ha roto en el momento en el que las fotografías del interior de la vivienda, todavía en obras, aparecieron en una revista holandesa, "Prive".

El Ayuntamiento de Wasssenar, tras producirse estos hechos, se ha visto obligado a sacar una ordenanza que prohíbe fotografiar la casa incluso desde el aire. Una normativa que ha sido terriblemente mal acogida por los medios de comunicación quienes no están acostumbrados a que se ponga freno a su trabajo.

Claro que, tanto la Familia Real de los Países Bajos como todos los profesionales de la prensa saben que nunca antes de "Máxima" se había perseguido tanto a un miembro de los Orange. Ésta ejerce una atracción excepcional y sin precedentes sobre los medios de comunicación holandeses. Prueba de ello es que son muchos los fotógrafos que han confesado que se arriesgarían a un arresto y un juicio para sacar a Máxima con su futuro hijo en el jardín o en la piscina.