Con motivo de su 50º cumpleaños, Felipe VI ha impuesto a su hija la Insigne Orden del Toisón de Oro, la máxima condecoración de la Corona, en una solemne ceremonia cargada de simbolismo y de guiños, familiares e institucionales. Foto: Fernando Junco

Leonor ha correspondido a su padre con dos besos y una reverencia, su primera reverencia en público. Foto: Fernando Junco

Entre los ochenta invitados estaban representados los tres poderes del Estado.  Foto: Fernando Junco

 "Tu familia estará siempre a tu lado: especialmente tu madre y también Sofía, que estarán contigo apoyándote; también tus abuelos; y por supuesto yo, tu padre, que sabes que confío en ti plenamente y que me siento enormemente orgulloso de haberte entregado esta mañana el Collar de la Insigne Orden del Toisón de Oro", le ha dicho Felipe VI a su hija en el que discurso más emotivo de su reinado. Foto: Fernado Junco

Felipe VI concedió a su hija está distinción con motivo de su décimo cumpleaños, el 31 de octubre de 2015, pero ha esperado a esta fecha histórica para imponerle el collar de la Insigne orden del Toisón de Oro, un reconocimiento que es “un elemento de tradición, continuidad e institucionalización en la figura de la princesa de Asturias como heredera de la Corona”. Foto: Fernando Junco

A pesar de ser un acto de la máxima relevancia institucional, le imposición de Leonor ha contado con guiños familiares y momentos muy emotivos. Foto: Fernando Junco

La Princesa de Asturias ha repetido la reverencia ante su madre, la reina Letizia, y sus abuelos los reyes Juan Carlos y Sofía cuando se ha dirigido a ellos para recibir sus primeras felicitaciones. Foto: Fernando Junco

La princesa Leonor ha sido la gran protagonista de un día en el que ha dado un paso más con heredera a la Corona, hay que recordar que el último en este sentido fue el 17 de noviembre de 2016, cuando asistió a la Apertura de la XII Legislatura en las Cortes Generales, la primera del reinado de Felipe VI. Foto: Fernando Junco