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Los grandes ausentes han sido los duques de Palma y sus cuatro hijos

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La anécdota del tradicional podado ante los fotógrafos la protagonizó la hija pequeña de los príncipes de Asturias, la infanta Sofía, que no se soltó ni un segundo de la mano de su abuelo y se mostró más tímida que su hermana a la hora de saludarles

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El obispo de Mallorca, Jesús Murgui, portando la mitra y el báculo y acompañado de los miembros del cabildo catedralicio y acólitos, recibió a la familia real a las puertas de la catedral de Mallorca y les fueron saludando uno a uno

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Pasadas las doce del mediodía, llegaban a la catedral en el mismo coche los reyes, con don Juan Carlos al volante, y su hija mayor, la infanta Elena, que fueron recibidos por el obispo de Mallorca, monseñor Murgui

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Mientras la princesa de Asturias volvió a acertar con un look cómodo y 'chic' en el que combinó una blusa estampada con blazer blanca, pantalones de color 'beige' y un original bolso con un llamativo detalle fucsia, sus hijas llevaban la misma rebeca de color verde y bailarinas marrones, pero vestidos de diferentes estampados

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La reina, que llegó a la isla el pasado miércoles, eligió para esta ocasión un estilismo en tonos rojos y negros, los mismos tonos por los que se decantó doña Elena, que lució una chaqueta de rayas y puso el toque de color con un llamativo bolso rojo con cadena dorada