La noche cae en Miami, pero no la apretada agenda oficial de los Príncipes de Asturias en Florida. Don Felipe y doña Letizia pusieron el broche de oro a su jornada de ayer, la penúltima de su visita oficial, y presidieron anoche una cena con sabor español en la emblemática Torre de la Libertad de Miami. Los más de 500 invitados presentes pagaron entre 500 y 25.000 dólares (entre 370 y 18.500 euros) como contribución a la entidad organizadora, la Fundación España-Florida. Empresarios, representantes culturales y políticos, entre ellos el gobernador de Florida, Rick Scott; el príncipe Kyril de Bulgaria, acompañado de una joven morena; el músico Antonio Carmona y su mujer, Mariola Orellana, integraban un concurrido auditorio al que el príncipe Felipe recordó no solamente los vínculos históricos que unen España con Florida en el 500º aniversario de la llegada a esta tierra de Juan Ponce de León, sino también los económicos.
"Hoy Florida, y Miami en particular, ofrece unas magníficas oportunidades económicas para el futuro. Los Estados Unidos constituyen un mercado estratégico para España y prueba de ello son las crecientes inversiones españolas en este país en los últimos años". Inversiones que, según detalló en su discurso, alcanzan los 6.500 millones de dólares (los 4.800 millones de euros), una tendencia que se fortalece porque las exportaciones españolas en este Estado ya llegan a los 500 millones de dólares (los 370 millones de euros). Y todo ello sucede porque las firmas españolas están transmitiendo una imagen caracterizada "por el trabajo bien hecho" y una labor "innovadora, seria y responsable", remarcó. Por estos motivos, el Príncipe se mostró "firmemente" convencido de que en el inmediato futuro "vamos a intensificar esta relación, tanto con inversiones españolas en Florida como con inversiones estadounidenses y de Florida en España".
También destacó en su discurso la conmemoración que le ha llevado hasta las tierras americanas de la Costa Este, el aniversario de la llegada de Ponce de León al territorio que bautizó como La Florida. El comienzo de una relación que sigue fortaleciéndose, hasta el punto de que hoy no se puede entender Florida sin la presencia española ni se puede imaginar los Estados Unidos sin el legado español. Y, finalmente, elogió la labor de la Fundación España-Florida, entidad que describió como "ejemplo tangible del buen trabajo de los españoles en Florida", de su capacidad de organización y de mantener la colaboración mutua, e incluyó la entrega del primer Premio Juan Ponce de León concedido por esta entidad. De manos del Príncipe, recibió el galardón Eduardo Padrón, presidente del Miami Dade College, una de las universidades más importantes de Estados Unidos, con 175.000 alumnos, en reconocimiento a su contribución al desarrollo del legado hispano en Florida.
La princesa Letizia subrayó el mensaje como siempre con moda made in Spain. La sobria elegancia de la Princesa durante todo este viaje se permitió anoche una licencia con un look de rompe y rasga. Un sencillo little black dress de seda con tirante ancho por delante y un canto a la sensualidad por detrás con un profundo escote en tul bordado de azabache en la espalda, también de Felipe Varela. Doña Letizia coronó su puesta de ayer con un recogido bajo al lado, que tenía doble cara como su vestido: entre sofisticado y español. Tras la cena, los Príncipes conversaron con muchos de los invitados impacientes por saludarles y también por hacerse fotos con ellos. Así concluía su penúltima jornada en Miami de su visita oficial a los Estados Unidos.
Antes habían recibido las llaves de la ciudad de manos del alcalde de Miami, Tomás Regalado, así como la proclama por la que se establecía la jornada como día de los Príncipes de Asturias en el condado de Miami Dade. Una visita a Univisión, la cadena de televisión en español más importante de los Estados Unidos, un almuerzo con el alcalde y un encuentro con el Gobernador habían completado la agenda del día. Antes de regresar mañana a Madrid, los Príncipes de Asturias presidirán un seminario económico, visitarán una escuela bilingüe y conocerán una exposición sobre las tapas españolas.
