Ningún residente de Candina quería que la visita de doña Letizia le pillara fuera de vacaciones, ninguno quería perderse por supuesto el importantísimo acto oficial para su ciudad: la inauguración del Centro Municipal de Acogida Princesa Letizia para atender a personas sin hogar y familias en situación de exclusión social, una obra promovida y mantenida por el Ayuntamiento de Santander. Así que, como era de esperar, ha sido de lo más calurosa la bienvenida a la Princesa de Asturias, que comenzaba esta mañana entre vítores su última semana de trabajo antes del merecido descanso estival. La princesa Letizia permaneció pocas horas en Santander, pero intensas. Primero, con los ciudadanos correspondiendo a las muestras de cariño, y después interesándose por todo lo que concierne al centro.
La Princesa no sólo ha apadrinado la instalación con el correspondiente descubrimiento de la placa, sino que, a petición propia, ha participado también en una sesión de trabajo para conocer la labor que allí se desarrolla y que ha calificado como un modelo de gestión "muy interesante". Doña Letizia, acompañada por el Alcalde de Santander, Íñigo de la Serna; por el Presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla; por el Delegado del Gobierno, Agustín Ibáñez, y por la Ministra de Igualdad, Bibiana Aido, se reunió durante una hora con los representantes de las distintas entidades que trabajan en el centro: las monjas Hijas de la Caridad, que prestan su labor asistencial; la asociación Nueva Vida de la Iglesia protestante, que se encarga del desarrollo del programa de evaluación y acogida; así como la organización Ampros, que se hace cargo de la alimentación de los residentes y del personal a través de un servicio de catering hecho por trabajadores con discapacidad física e intelectual.
