Cena oficial en el Palacio Real en honor al Presidente de Hungría y su esposa

Los Príncipes de Asturias acompañaron a los Reyes durante la velada

Por hola.com

VER GALERÍA
PULSE SOBRE LA IMAGEN PARA VER LA GALERÍA FOTOGRÁFICA


El palacio real de Madrid ha vuelto a vestirse de largo. Los Reyes, acompañados por los Príncipes de Asturias, ofrecieron anoche una cena oficial en honor al Presidente de Hungría, Laszló Sólyom, y su esposa, Erzsébet, que se encuentran en España realizando una visita oficial de tres días de duración con el objetivo de estrechar las relaciones bilaterales entre ambos países e intercambiar impresiones, entre otras cosas, sobre cuestiones de actualidad como la presidencia española de la UE.

Al tratarse de una cena oficial, pero no de gala, no hubo baile de tiaras en los salones palaciegos. Tampoco se echó en falta. Las damas reinaron igualmente. Doña Sofía brilló con un vestido compuesto por un cuerpo negro con cuello recto y manga larga y una falda hasta los pies, de color turquesa, con bordados arabescos en negro, mientras la Princesa de Asturias vistió para la ocasión una blusa blanca de seda con pechera y manga francesa adornadas con pequeños volantes, falda negra con corte sirena y complementos (maxi cinturón y bolso limosnera) en negro.

 

VER GALERÍA

 

No faltó tampoco otro de los ingredientes habituales de las citas de Palacio: las muestras de cariño entre los miembros de la Familia Real española. Las confidencias y bromas entre los matrimonios, entre madre e hijo y entre suegra y nuera. Tampoco, la buena sintonía entre anfitriones e invitados de honor. Si algo caracterizó la velada fue el buen humor.

También el mensaje del Rey fue profundamente optimista. Don Juan Carlos centró gran parte de su discurso en la presidencia de la Unión Europea (UE) que España asumirá en el primer semestre de 2010 y a la que seguirán las de Bélgica y Hungría. Acontecimiento que, en sus palabras, "permitirá potenciar la construcción de una Europa aún más próspera, más segura y más abierta", por lo que "asumimos una gran responsabilidad, pero también una preciosa oportunidad". Se refirió también a las excelentes relaciones entre Hungría y España y a los múltiples encuentros mantenidos por los responsables de ambas naciones, y abogó por impulsar los intercambios económicos y comerciales.