10, 11, 12, 14, 15, 16 y 17 no es ninguna contraseña secreta ni tampoco la combinación ganadora de ningún premio de azar. Son los DNI de la [Familia Real española], incluidos los de las benjaminas de palacio. Aunque les quedan aún unos cuantos años para la mayoría de edad, las infantas Leonor y Sofía ya tienen sus números (16 -en el caso de la mayor- y 17 -para la pequeña-), que siguen correlativamente al que utiliza su padre, el Príncipe de Asturias, el 15.
Las Infantas son las últimas incorporaciones reales al largo desfile numérico del Documento Nacional de Identidad, que echó sus primeros pasos un mes de marzo de 1944, en plena posguerra, cuando el General Franco decidió la creación de un papel que acreditara la identidad de los españoles. No se emitió hasta 1951 el primer carné, el número 1, que fue a parar a la cartera del Generalísimo; su esposa, Carmen Polo, llevó el número 2, si bien bastante tiempo después de que se expidiera el primero, ya que, como cuenta Francisco Tesorero, secretario general de la Unidad de Documentación de Españoles y Archivos de la Policía Nacional, no solicitó su DNI hasta 1965, y su hija, Carmen Franco, el número 3. A [don Juan Carlos] y [doña Sofía], entonces Príncipes de España, se les asignaron los números 10 y 11 respectivamente; a las infantas Elena y Cristina les llegó el turno en 1980 y les correspondieron los números 12 y 14 -se descartó el 13-, y posteriormente el 15 le fue adjudicado al [príncipe Felipe].
El Documento Nacional de Identidad nació con vocación de control para documentar en primer lugar a "los que quedasen en prisión atenuada o libertad vigilada", es decir, los que salían de prisión y en segundo a "los hombres que por su oficio o negocio cambiasen de domicilio". Desde aquel primero hasta 1980, se establecían cuatro categorías, según las condiciones económicas de los titulares. "Su coste sería de 25 pesetas para los de primera; diez pesetas para los de segunda, y cinco los de tercera. Se facilitaría gratuitamente a los 'pobres de solemnidad' y a los productores que se encuentren en paro forzoso". En la actualidad el DNI-E, que cumplió su tercer aniversario en marzo, cuesta 10 euros.
