Los Duques de Palma y familia disfrutan de una divertida jornada playera en Palma de Mallorca

Al cuidado de doña Cristina y don Iñaki, estaban sus cuatro hijos, los dos de la Infanta Elena y los de Alia de Jordania

Por hola.com

Tras unas vacaciones familiares en Mozambique, los Duques de Palma y sus cuatro hijos ya se encuentran disfrutando de su tradicional asueto en Palma de Mallorca junto al resto de la [Familia Real española]. La infanta Cristina e Iñaki Urdangarín inauguraron el álbum estival en la isla balear con unas refrescantes imágenes del matrimonio disfrutando de una jornada playera junto a sus vástagos, Juan Valentín, Pablo Nicolás, Miguel e Irene, y compañía. O sea, los hijos de la infanta Elena, Felipe y Victoria Federica, y las tres hijas de Alia de Jordania, gran amiga de los Reyes.

A bordo del Fortuna
Todos se lo pasaron en grande en alta mar a bordo del Fortuna. Durante la travesía, se pudo ver lo bien que se llevan los dos nietos mayores de los Reyes, Juan Valentín y Felipe, que no pararon de jugar y de hacer de las suyas, y lo divertido que resultó parar unos instantes y zambullirse uno tras otro los viajeros de la embarcación real -Iñaki Urdangarín no dudó en lanzarse al agua de cabeza junto con la hija mayor de Alia de Jordania. Esta salida permitió también descubrir el estilismo náutico de los Duques de Palma: don Iñaki eligió un bañador amarillo con dibujos en tonos rosas, azules y verdes, y la Infanta Cristina, un favorecedor bañador negro. Tras darse un refrescante baño subieron al barco por las escaleras, dando buena muestra de la excelente forma física que poseen.

En la playa, como una familia más
A continuación, desembarcaron en la playa del Savall. El Duque de Palma volvió a descubrirse como un auténtico padrazo entreteniendo a sus pequeños y, especialmente, a Irene, la benjamina de la familia, con quien pasó una divertida jornada de cubo y pala. Mientras, la Infanta, muy guapa con un blusón estampado, bañador negro y maxi gafas de pasta negra, contemplaba desde su toalla azul la tierna estampa al tiempo que vigilaba al resto de los chicos bañarse en el mar. Las grandes ausentes fueron las infantas Leonor y Sofía, hijas de los Príncipes de Asturias, que se quedaron en la residencia oficial.