Las verdaderas reinas del verano en Palma han hecho finalmente acto de presencia en el Club Náutico de la isla balear. Sin lugar a dudas era una imagen muy esperada. Y, precisamente por ansiada, la aparición sorpresa de las infantas Leonor y Sofía a la salida de las regatas ha causado enorme revuelo, y hasta furor, en los medios gráficos. Una salva de disparos fotográficos les ha dado la bienvenida clamando su intención de no dejar escapar ni un solo movimiento de las pequeñas sin retratar: tanto en el posado junto a sus padres y su abuela paterna, la Reina, a la entrada, como durante su paseo por las instalaciones, y en su visita al CAM, el velero en el que don Felipe compite en la XVII edición de la Copa del Rey de vela.
Leonor y Sofía, las 'estrellas' del verano La [reina Sofía], con polo rojo, pantalón blanco y alpargatas peep toe como su nuera, y la [princesa Letizia], con polo y pantalón pirata de color blanco y zapatillas atadas al tobillo, se presentaron en el Club Náutico con las Infantas, dos muñecas rubias conjuntadas con el mismo vestido blanco con detalles en rojo y las mismas abarcas menorquinas a tono, para recoger al [príncipe Felipe] tras un largo día de regatas. Pese a que llegaron un poco somnolientas, debido a que se habían quedado dormidas en el coche, y les llevó un ratito entrar en la dinámica de los saludos-sonrisas-flashes, enseguida las Infantas se metieron en el papel y se hicieron amigas de las cámaras obsequiándolas con mil y un gestos dignos de foto: las palmas de Leonor, los saludos de Sofía, los bailes de la primogénita de los Príncipes de Asturias poco antes de irse y más sonrisas y saludos de la benjamina...
Y, entre tanto click desaforado, porque las ganas de verlas nuevamente eran muchas -no habían aparecido en público desde el pasado mes de marzo también en Palma-, doña Letizia comentaba orgullosa lo grandes y cambiadas que estaban las niñas, especialmente Sofía, a la que ya le quedaba poco para dar sus primeros pasos sola. Más anécdotas acarreó su visita al CAM, donde la pequeñas se divirtieron de lo lindo. Una, Leonor, al mando del timón que giró todo el rato y la otra, Sofía, observando y cogiendo cuando tenía oportunidad cada cachivache que se encontraba a su alcance. Todo un broche de oro para la segunda jornada náutica de la Copa del Rey.
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